Hoy al levantarme he comenzado a pensar sobre qué y cómo expresar mi reflexión de hoy, pero me encuentro con demasiadas cosas negativas del día de ayer, seguramente fútiles e inútiles, pero que me dejaron bastante tocado.
Cosas que no entiendo como el desprecio a la mano que comparte apoyo en estos momentos, el ser humano es un animal muchas veces despreciable y no se si es por la meningitis que tuve de pequeño o porque en mi cabeza no caben esos sentimientos, la ira entró como pedro por su casa en mi interior, estos días, semanas o meses, no se cuanto tiempo hace que nuestra normalidad explotó y se convirtió en algo tan diferente que jamás imaginamos, nos convirtió nos transformó en algo que mucha gente que trabaja conmigo no era. Pero nunca y digo nunca delante de mi respetaré ni compartiré opiniones de mierda de desprecio por cualquier trabajador que comparte turno en el hospital, sea de donde sea, hubiera hecho o no trabajos en unidades especiales o no. El esfuerzo que he visto en gente no acostumbrada al trabajo con pacientes críticos ha sido como minimo loable entre mis compañeros y si se critica eso, ten por seguro que el problema no es del inexperto sino del que supuestamente dice estar por encima siendo un/una palangana.
Partiendo de la base que no somos putos héroes, ni salvadores, ni ninguna mierda que salga del hecho que simplemente hacemos el trabajo que nos toca en estos momentos lo mejor que podemos.
Opiniones como las que escuché ayer sobran.

Ánimos a todos, nadie puede defraudar si la persona que teóricamente sabe no les defrauda primero.

Fin del pensamiento de una persona con miedo oculto.