No todas las noches fueron como esta, recuerdo que todas las personas salían a las calles, a los cines, a los parques, digo salían porque siempre fui un hombre solitario por eso no me afecto el claustro, al principio los comunicados decían que era un simulacro, luego que eran solo 3 días, luego 15 días, entendí lo que vendría, han pasado años, para mi muchos más pues siempre he estado encerrado.
Recuerdo aquella noche porque se extendió tanto que no supimos si volvería a llegar el día, los relojes decían ser las 12 la hora en la que el sol está en su cúspide pero los pájaros regresaban a sus nidos, el ganado confundido marcho al corral, la gente encendía linternas para poder ver y después de muchas horas la noche continuaba allí, tan oscura como los siguientes días, yo miraba siempre el reloj y en mi agenda escribía:
- 27 de septiembre 10 am, la noche continua
- 27 de septiembre 3 pm la noche continua
- 28 de septiembre 7 am la noche continua
Antes en aquella agenda había citas y reuniones pero eso fue lo primero que cambio, declarado el encierro todo aquel humano que una vez trabajo, ahora estaba en su casa cumpliendo ese burdo sueño que tenía al salir de la oficina, no entendíamos del todo aquella negrura y no podíamos salir a buscar respuesta en lo hondo de la pavorosa oscuridad
- 29 de septiembre se ve al disiparse la niebla la luna, aunque es de un extraño color
Entonces eso se supo en foros, las redes sociales en internet comunicaban, luna roja en Tailandia, aún estamos bien, luna morada se observa en México, hay escases de víveres, luna escarlata en parís, las luces se apagan y los noticieros llenaron cobertura hablando de por favor no salir de nuestras casas, no entendíamos el porqué, hubiéramos querido no saber él porque, los foros continuaban
- @ ryan basques +55: se escuchan sonidos, crujir de máquinas lejanas
- @ armando vivas +57 ¿puedes ver algo?
- @ yanina Ruth +54 aquí se escuchan rugidos fuertes en toda la ciudad desde lejos
- Salio del grupo
- Salio del grupo
- Salio del grupo
- Salio del grupo
- Salio del grupo
Así una larga lista lleno la pantalla, al encender la televisión esta se quedaba solo en estática, pensé en el wifi como si fuera una esperanza, quédate un poco más le dije, al poco rato me quede sin señal, sabía que pasaría, todo a lo que le había dicho quédate un poco más resultaba yéndose de inmediato, revise conversaciones anteriores, el celular había guardado todas las charlas, desde chistes hasta profundos pensamientos, poemas y cuentos.
- ¿Qué harías si fuera este el último día? Me dijo @mayra +508
- Ciudadessingente.Rar @bryan ramirez +51
- Lo mismo de siempre, leería, pensaría en ella, pondría algo de música y escribiría @armando vivas +57
Así había montones de conversaciones, incluidos videos y fotografías, llenaban la memoria del celular y teniendo tanto tiempo libre revise cada archivo
- Quiero estar con mi familia, pero estamos en el hospital, espero verla pronto @santiagorick +563
Los foros me ponían paranoico siempre dejaban ese suspenso incomodo, todos preguntaban, ¿oye que te paso?, o ¿porque estas allí?, ¿cuantas personas quedan allí? Era la angustia en el superlativo de pensar también en ella. Revise el anaquel, quedaban galletas integrales, pan integral, todo integral así que me dispuse a salir.
Sabía bien lo que me esperaba si la policía me encontraba, pero…
Afuera no había nadie, esperaba ver filas en los supermercados, pero no, mire el celular descomprimí el archivo ciudadessingente.rar, entre los archivos se veían grandes ciudades desoladas, ni un alma se veía, bueno ni un alma humana porque a detalle encontraba algunas pistas. Mala idea para estar allí, agache rápido mi cara, mi cuerpo, mi todo, no hice ningún sonido, no quedaba ni dios para poderle orar, aquello paso rápido, no le pude ver bien, si lo hubiera hecho quizás el asombro me habría echo descubrir, respire profundo para no volver a respirar al menos por un minuto o más, espere inmóvil hasta sentir la calma porque así como siento el peligro también siento la tranquilidad, entre en el almacén lo más rápido que pude, tome un bolso y lo llene de golosinas, fume un cigarrillo, nunca había fumado hasta ese día, pero los anaqueles estaban llenos de cajetillas y dulces, no había más.
Aquella noche o día, (como saberlo pues el cielo continuaba moribundo) presenciaba como todo se apagaba, como mil voces distantes se escuchaban y después súbitamente, silencio, odio la noche y más aún el silencio, les temo a ambos en gran medida, mis costumbres ermitañas me habían hecho ágil para caminar a oscuras y el no tener amigos me había hecho sutil a la hora de dar mis pasos, entonces salí del almacén, no quería salir de allí, ¿quién abandonaría un refugio lleno de golosinas? revise el celular, parís01.jpg, una fotografía normal, así cada fotografía pasaba en análisis minucioso de mi retina y… paris48.jpg allí estaba ese ser, lo detalle para agudizar mis sentidos y saber cuándo esa cosa estaría cerca o lejos, allí o haya, arriba o abajo, no podía estar en ese lugar, no podía estar en ninguna parte, pensé: seguramente fue el sonido, si, cuando las personas escuchaban ese sonido extraño se desconectaban de las redes sociales y de sí mismos, si, seguramente ese sonido tenía la culpa, mis oídos se volvieron mi objetivo inmediato.
El tiempo se desdibujaba, no sabía qué hora era o que día, ni qué fecha, dependiendo de la buena suerte podrías sentir que era lunes o viernes, es decir mi lunes seria infinito pero aun sentía que podría hacer algo, el sonido aquí aún no se escuchaba, aun tenia oportunidad, se veían casas con luces encendidas, se sentía que aun habían personas por allí, quizás dándose sus últimos abrazos, quizás sus últimos besos, yo le habría dedicado un último texto, fume otro cigarrillo y continúe, mis pasos siempre han sido lentos y desapercibidos, siempre sospechando de cualquier movimiento, siempre sospechando de mí mismo, mis corazonadas suelen ser certeras, mi soledad me permite charlar conmigo mismo
- No. Armando para haya no vayas
- Pero es el único lugar al que podría ir
- ¿Qué tal que esas cosas están en las casas?
- Entonces, ¿voy a la montaña? ¿Qué harías tú?
La decisión no fue tomada por mí, sino por una gran llamarada azul que atravesaba el firmamento con gran rapidez, me tape los oídos, el sonido pronto se escucharía, era momento de no volver a ver atrás.
La ansiedad y angustia no me hacían dudar, subí la montaña sin inquietarme por lo que pasaba en la ciudad, volví a hablar conmigo mismo
- Y… ¿ahora qué? ¿seguimos caminando o nos quedamos?
- ¿Podrían venir?
- Claro que sí, están en todos lados, es cuestión de tiempo
- ¿Entonces?
Me había prometido no volver a suspirar, así que seguí caminando a oscuras alejándome de todo, incluso de mí mismo, hasta que el cansancio y el sueño decidieron detenerme, antes de cerrar los ojos mire mi celular para volver a ver sus fotografías, lo último que le escribí fue, no te olvides de mí, puedes contar conmigo siempre y ahora estaba allí agotado y solo, como los viejos tiempos…
Cuantas horas o días habrán pasado hasta que abrí los ojos, creí que lo mejor era esperar a que lleguen, después de ver sus fotografías siempre sentía que esa podría ser la última vez, así que le di un beso a la pantalla del celular y me deshice de él, tantas despedidas habían destruido mil mundos antes de que por fin la tierra quisiera que ya no estemos en ella, estaba preparado para escuchar el sonido, después de decir adiós te sientes infinito, destape mis oídos pero no escuchaba nada, hice fogatas, hice ruido, cante y grite, tire piedras y ramas pero nadie venia por mi
- A algunas personas no las quiere ni la muerte
- ¡Cállate¡ quiero estar atento al sonido
Regrese a la ciudad, mire en estantes periódicos de noticias viejas, encabezados que decían, no tengan miedo, volví a fumar algunos cigarrillos y comer algunas golosinas, añoraba aquel sonido pero ya todos se habían ido y me habían dejado en un lugar como su corazón, un lugar oscuro y vacío
|