Who can be now gay parte 27

Llegó a casa de los padres de Óscar para hablar con ellos.
-¿quién es usted? – preguntas Araceli.
-me llamo Isabel, soy madre de Gustavo el novio de Óscar, su hijo.
-¿qué quiere aquí? no queremos saber nada de ese – respondió Araceli.
-¿qué pasa? – preguntó Jacobo.
-es la madre del otro
-¿del desviado? – expresó Jacobo.
-no voy a permitir que te expreses así de mi hijo.
-señora lárguese mi casa – le exigió Jacobo.
-no puedo creer que sean tan cerrados. No se dan cuenta. Oscar los necesita en este momento, se está muriendo.
-¿de qué habla? – pregunta Araceli.
-Óscar sufrió un accidente hace un año en el que adquirió una bacteria ahora necesita un riñón.
-no le creo nada – le respondió Jacobo – eso es un chantaje.
-me dan lástima ojalá y nunca se arrepientan.
Sin darse cuenta, Isabel dejó una carta en la mesa, en la madrugada Araceli se levantó a tomar agua y vio la carta que decía:
“sé lo complicado que puede ser, que te enteres de la orientación sexual de un hijo. Cuando Gustavo me llevó a su primer novia dudé si realmente la amaba, desde que él estaba pequeño me di cuenta que prefería ver a los niños que a las niñas, se lo comenté a mi esposo y me dijo que podría ser pasajero, pero no fue así. Pesamos que nuestra familia era normal y sí lo es. Mi hijo fue perdiendo el brillo como ahora. Pero cuando tu hijo llegó a la vida del mío el brillo regresó, no sabes cómo llegaba de la universidad, eran horas al teléfono, suspiros, cartas que se envían, a eso lo llamo amor de verdad.
Como madre me gustaría que las cosas fueran diferentes pero no es así, y al final acepté el destino de mi hijo, cuando me dijo que amaba a un hombre, le dije que ya lo sabía, que la madres tenemos un sexto sentido y que su orientación no cambia el amor que siento por él al igual que su padre.
Ahora, Óscar nos necesita a todos, Laura su hermana la está pasando mal, pero los estamos apoyando, yo veo como mi hijo todos los días se levanta temprano para bañar a su futuro esposo, sabes, hoy le pidió que se casa e hiciera una nueva vida… te pido que veas por él, es tu hijo.”
Eran las 3:40 de la madrugada, hacía mucho frio. Gustavo dormía en el sillón, Isabel estaba en la sala, Ramón en su cama y las cosas se pusieron mal. Oscar se puso mal dejó de respirar, lo llevaron al hospital.
El médico dijo que no había mucho que hacer por él…
Continuara…