Me levanto a la 8. He tenido suerte, la mujer que viene a vestirme, lo ha hecho rápido porque no me ha dolido la espalda. Me tomo un café y estoy un rato ordenando mis ideas para escribir el segundo cuento para participar en www.relatscurts.tmb.cat. Pensé que añadir unas líneas a un cuento que tengo escrito en esta web, (eso si, lo he tenido que dar de baja mientras dure el concurso) sería más fácil y es justamente lo contrario. No sé cuántas veces he tenido que usar el contador de caracteres para no pasar el límite de 3.500. Finalmente, logré encontrar las dos últimas frases que sirvieron como nexo a la primera frase del relato. Ha salido un nuevo cuento nuevo, inédito y original como piden las bases del concurso. De momento, solo se puede ver en la web ya mencionada unas líneas más arriba. Los cuentos son: "La decisión" y "Trozos de vidas", y están firmados bajo el seudónimo de Powerfox. (Dentro de la web, hay un buscador que escribiendo Powerfox, ya salen) Del 16 al 30 de abril, si os gustan, se pueden votar. Por supuesto, os animo a los que viváis en Barcelona y alrededores para que colgáis relatos. ¡Nunca se sabe!

Antes del mediodía, dejo de escribir. De esta manera relajo la espalda y como más tranquilo. Después de comer, veo las noticias y apago la tele. Me he comprado un libro de lengua española que usan los alumnos mayores de 25 años para ingresar en la universidad. A mi, me sirve porque explica los conceptos de manera sencilla; y si algo no entiendo, puedo resolverlo buscando información en diferentes páginas webs.

Antes de cenar, miro mi correo electrónico. Sobre las 21 horas estoy en la cama no para dormir, sino para cambiar mi posición. Pienso que ya queda un día menos para final el confinamiento.

Lo que he contado es una punta de un alfiler. Seguro que hay historias, anécdotas, páginas webs, trucos, recetas de cocina etc... Propongo hacer un diario personal (voluntario) de los cuenteros para dicho fin. Será nuestro granito de arena para ayudar a los demás. ¿Os parece bien?