...habían pasado dos meses de encierro por el coronavirus, el joven matrimonio aprovechó este tiempo para construir en su casa una pequeña habitación de lectura con dos grandes ventanales por los cuales se apreciaba el patio con un par de árboles, flores y plantas varias...en un rincón ambos habían puesto varios ladrillos para terminar la construcción, estaba justo al lado de los ventanales... decidieron dejarlos sin pintar, ladrillos a la vista, los ladrillos conformaban un ángulo...ambos se miraron y con una sonrisa dijeron: esta es nuestra ventana...cada tarde se sentaban frente a los ventanales que dejaban ver el bonito patio y de reojo miraban los ladrillos y eran capaces de ver a través de ellos, eso ladrillos descoloridos, colocados justo al lado del gran ventanal, despertaba su creatividad, era una especie de ventana distinta, una ventana que lograba como un efecto de espejo y a través de esos ladrillos eran capaces de abrir una ventana a su propio interior.