Si bien esto no es un poema o un cuento, pues el poeta sin la musa adecuada
se quema y un cuenta cuentos sin una buena historia no es nada, si quisiera que lo tomes
como una carta abierta e informal, desenfadada y sin preocuparse por los pequeños errores
así como lo fue nuestra historia.
Ojalá que la persona con la que te encuentres en estos momentos te convierta en su oración,
te busque en sus buenos momentos y no solamente en esos momentos difíciles, pesados, en los que solamente se busca a alguien para alivianar la carga.
Ojalá y cuando hable de ti se le iluminen los ojos como si en ellos tuviera prisionera a una galaxia, que cuando hable del futuro hable de dos y no solamente de uno, que cuando hable de amor hable de tu nombre.
Ojalá que te escriba poesía, aunque sea igual a la mía, tonta, corriente y barata, pero que al leerla le parezca increíblemente bella y artística por el simple hecho de haber sido tu el motivo para juntar palabras, de haber sido tu el motivo para pensarse poeta.
Y no mi querida dama, no es sarcasmo ni despecho, simplemente son deseos y no es que yo sea un hombre bondadoso, es más, robaré esta ultima línea para mí y haré una pequeña petición:
Ojalá que cuando leas esto sonrías y pienses en lo que fuimos, pero sobre todo, que sientas
el riguroso peso del haberte ido. |