tengo despojos de varios veranos entre los dedos
y un atardecer en mi ventana
que le antecede a esta noche
tan llena de vos

tengo bendiciones para tu ausencia
y una lágrima también
para no perder la costumbre

tengo oraciones sanadoras
y un vaso de ron, bien lleno
para brindar por lo que no fue
mientras suena mi canción favorita

tengo estas ganas de escribirte
a pesar del reloj
(de las horas y los años)
y un papel infinito

tengo
todo ese cielo que inventamos bajo mis sabanas
y los versos que escribiste con tus dedos en mi piel,

tengo un océano de amor en el pecho
y aunque ya no estés aquí
hoy, lo siento.