Uno de mis mejores amigos se suicido, me costo mucho poder entender lo que paso y quizás sea un dolor que nunca pueda superar; anoche llegue a casa después de que alguien en quien yo confió me hiciera mierda con un mensaje. No podía hablar, no podía ni comer, simplemente estaba paralizada por un dolor que me recorría todo el cuerpo y no permitía que dejara de llorar. Finalmente un amigo llamo, me dijo bebe llora, llora mucho que yo estoy aquí para vos y yo llore le llore tanto que la llamada se nos cortaba todo el tiempo y solo teníamos el anhelo de poder estar cerca para darnos un abrazo. Cuando colgamos me quede en silencio y también a oscuras, agarre mi osito de peluche y lo sujete con fuerza contra mi pecho y volví a llorar y entonces me di cuenta que automáticamente llamaba a mi amigo que murió y le decía por favor ven y abrázame, por favor ven y abrázame y así me quede por un largo tiempo hasta que amaneció, hoy me bañe y me arregle como pude y llegue al laburo para fingir que todo estaba perfecto.

Y se preguntaran porque contar algo tan personal? lo cuento por tres cosas que entre si tienen relación.

La primera es porque aun hoy nos da miedo hablar del suicidio de forma publica, es un tema tabú que escondemos debajo de la alfombra y nos hacemos los bobos frente a una realidad que es la segunda causa de muerte en el mundo de adultos jóvenes y ancianos (en algunos países incluso de niños) el suicidio es una realidad y cada día arranca a muchas personas del lado de sus seres amados. Esas personas no son cobardes, toman esa decisión en un momento desesperado o en una sistemática situación que los lleva a perder toda esperanza y nosotros los que quedamos nos creemos con la autoridad de juzgarlos. Yo también juzgue pero ya deje ir eso y entiendo que aunque quizás no pueda comprender lo que paso con mi amigo y aunque el dolor cada día parezca crecer mas en mi, el siempre estará porque es parte de todo mi ser y el es una persona que amo amar y nunca dejara de hacerlo. Que tal si dejamos de ser pacatos y hablamos sobre ello públicamente, de las lineas de ayuda y de las consecuencias.

Lo segundo por lo que que hablo lo que paso anoche es por ese sentir que yo se que a muchos de ustedes les pasa ahora mismo, el llegar a casa y darte cuenta que no tienes la fuerza ni para hacerte un huevo frito, quedarte largo tiempo bajo el agua caliente, no poder dormir y a la vez no poder despertar, aislarte de quienes te aman, no querer contestar el teléfono, estar irritable, descubrirte llorando en silencio, ensayar risas para que los otros vean que estas bien, ocultar que te sigues sintiendo así porque eso aumenta la culpa, tener que escuchar a los que se creen con el derecho de dar consejos que no pediste y en realidad están emitiendo juicios morales sobre tu dolor (nunca va a servir, no exageres, tu eres fuerte, todo es pasajero etc) sentir miedo, sentir que la piel te arde, ponerte cualquier cosa porque ya no te entretiene intentar verte bien, ver tv y a la vez no ver nada, dejar las cosas que te gustan.... si todo eso se llama depresión y es algo que no solo me pasa a mi ahora sino que seguro le pasa a mas de uno que lee; cuando estaba adolescente fui novia de un chico que lo sufría y yo estúpidamente lo juzgue pero tiempo después tuve que pedir perdón y aceptar que eso no te pasa por fuerte o por débil, te pasa porque te pasa, te pasa porque así es la vida y a vos te toco eso en ese momento y es una enfermedad que puede volver... quiero decirte que esta bien, que el dolor esta bien, que llorar esta bien, que sentirte así esta bien, que existen personas realmente capacitadas para darte una mano y que no debes aislarte tanto como para perderte, permite que quienes te amen ayuden a reparar eso tan precioso que quizás otro supo romper y quiero decirte que la empatia se desarrolla a partir del dolor y eso de alguna forma te hará una persona mas hermosa después de poder asimilarlo, porque ya no tendrás el consejo fácil que juzga sino la comprensión honesta y noble de quien entiende; deja que el agua caliente te cubra la piel y deja que quien ame te abrace.

La tercera cosa que quiero decir es gracias, gracias a aquel amigo que paso horas escuchándome llorar anoche, que me dijo bebe llora, yo no te voy a juzgar ni cuestionar, yo estoy aquí para escucharte, bebe llora y llora sin importar el tiempo que necesites. Gracias por no estar allí con el consejo no pedido y la moralidad rampante a flor de piel, gracias por ser empatico y cobijar con tu silencio y tus palabras el dolor, porque eso es difícil y muchos no saben hacerlo, acompañar a alguien que sufre y mas si es alguien que amas es un acto delicado que necesita del fino acto del querer, del entender que primero esta el otro y no tu juicio desmedido y tus ganas de cuestionar. Cuando ese alguien que amas se agarra a tu cuerpo y llora, cuando desploma su intimidad y sus miedos en ti, lo hace porque te necesita y muchas veces te necesita en silencio. Yo no supe escuchar a un amigo y claro no fue por mi pero se suicido y de alguna forma es algo que jamas me perdonare, cuando el intento hablarme puse mi juicio fácil primero y cuando me di cuenta de lo imbécil que era ya fue demasiado tarde. Quizás mas cerca de lo que crees hay alguien sufriendo, alguien que llega a casa y se desploma a llorar, alguien que necesita que le digas aquí estoy bebe, estoy para vos y el saber estar es el verdadero acto de amor. En ocasiones simplemente con el respeto puedes devolver la sonrisa a un rostro, con un mensaje bonito, con una risa... fíjate que las cosas mas hermosas y necesarias son las mas sencillas y esas cosas parecen ser las mas difíciles porque nos dejamos llevar por la rutina superficial y nos hacemos daño y hacemos daño a quien amamos. Gracias por ser así bebe.

Yo soy fuerte, soy inmortal y esto como todo pasara, sigo riéndome a carcajadas, sigo siendo esa persona inocente que nada entiende y sigo escribiendo, habrá quien juzgue porque escribo y yo les diré que lo hago porque es mi legitima expresión y porque se que lo que escribo le sirve a otros y es mi forma de poner mi granito de arena al mundo y si para ello tengo que exponerme lo seguiré haciendo, dejemos ese miedo estúpido al que dirán si exponemos nuestros sentimientos y enfoquemonos en lo importante en que necesitamos y en que necesita el otro. No en la verguenza de que alguien diga lo que siente, uy por dios que dirá la gente... enfoquemonos en lo que importa y si esta noche estas como yo abrazado a un osito de peluche para evitar llorar, llora que luego de ello la sonrisa sera mas genuina.

23 de enero 2020.
danesda