Nunca creí decir, que probé a la Comadre, suena grotesco y tal vez por las cosas del idioma es mejor ser un poco mas explícito. Pero fue así, hace dos meses el compadre nos invito a una reunión en su casa, era día domingo, llamo a eso de las ocho de la mañana para invitarnos a mi esposa y a mi, a una pequeña parrillada que iba a ser con los amigos de confianza en su casa, yo gustoso acepte, el me dijo que estuviera en su casa a esos de las dos de la tarde, y yo caracterizado por la puntualidad a esa hora estuve, llegando allá conseguí algunos compañeros de tragos, matrimonios amigos del club etc. Fue una amena reunión, aunque note la ausencia de la comadre, hecho que me llevo a preguntarle al compadre por ella, el me dijo que andaba de viaje para que su mama, yo me reí y jugándole le dije, con razón tiene la fiesta armada, el rió y me dijo - que cree usted compadre, hay que aprovechar -, realmente lo note muy alegre y contento.
La reunión, debo confesar estuvo muy agradable, Un buen Whisky 18 años, música agradable, buenos chistes, y una parrillada que estaba a pedir de boca, exquisita carne, dulce jugosa y muy bien zasonada, realmente el compadre saco a relucir sus dotes de chef, al final la reunión termino como a las nueve de la noche, sin queja alguna, muchas risas, muy buen Whisky, excelente comida, a la final nos despedimos y cada cual se fue para su casa.
Dos semanas, habían pasado desde ese día, y ese mismo tiempo llevaba yo sin ver al compadre, mi sorpresa fue cuando salgo dos domingos después a comprar la prensa, y encuentro en el periódico, en la sección de sucesos, “Hombre, descuartiza a su esposa y se la da en parrilla a sus amigos” solo dije, ¡Nos comimos a la comadre!
Hammurabi
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