Esto no es lo que esperabas. No encontrarás aquí ninguna idea original. Ni aquí, ni en ningún lado. Nunca nadie podrá jamás gozar de esa dicha. Ese concepto no existe. Olvídate de él. Es que los simios nunca fuimos dueños ni siquiera de nuestros pensamientos, pues son el resultado de la acumulación de cientos de ideas ajenas. Somos clones, nos emulamos. Al final, cualquier vulgaridad que suene en la radio tendrá la misma originalidad que tiene el tercer movimiento de Claro de Luna de Beethoven. ¡Y no es que lo diga yo! ¡Ya claro está! ¿Quién lo ha dicho entonces? Todo el mundo lo sabe ;)