-Te has comunicado con el 226789, en este momento no puedo atenderte, deja tu mensaje después de la señal...pipppppp!!!!

...Sentirme indefensa. Vulnerable. Se ha tornado mi estado de ánimo permanente en este último tiempo.
No quise, tampo quiero sentirme así. No obstante tu presencia me lo impone. Tus ausencias me lo decretan. Creo que no se amar sin desgarrarme, sin donarme. Tu lo has descubierto, y aunque sé que es inconciente, sacas provecho de mi debilidad.
Ayer comenté lo que me pasaba con una circunstancial compañera de viaje en el colectivo. Primero me miró sorprendida ante semejante confidencia. Guardó silencio al punto de avergonzarme por soltar al viento mis reflexiones personales. Sin embargo, junto al envión para levantarse, me expresó llena de tristeza pero queriendo consolarme: "a mí me pasa lo mismo... a mi hermana también, y mi mejor amiga igual. Creo que las mujeres amamos de más."
...Tal vez sea así. O tal vez los hombres aún no aprendieron a hacerlo.
Te invito a que lo pienses.