Un corto momento que te lleva a creer que tu manera de sentir es tan parecida a la de los demás, pero tan fugaz como ese pensamiento en medio de una noche de licor, de oscuridad y de soledad. Al final de la noche te das cuenta que cada ser humano siente y piensa totalmente opuesto a ti.

Nueve planetas, el sol y las estrellas, suficientemente grandes como para pensar que la vida dista entre tu trabajo y el nicho de tu hogar.

En medio de un universo inverosímil y a veces solo pensamos en el universo reducido de unos cuantos pensamientos.

Infinitesimales son los milagros en la vida, como las posibilidades a tus sueños. Todo parte de un respiro, una copa negra, un instante gris y una pasajera incomunicación.

La vida es tan diferente para algunos pero en el fondo los nacidos más cercanos gozan o desdichan de las mismas constelaciones del universo. Casualidad o Dios, en presencia de un profundo misterio nos asemejan a realidades casi imposibles de improvisar.

Tal parece que previsar, no está hecho para los sensibles de corazón, pues cualquier consternacion ataca la razón.