UNA OSCURA ENERGÍA.
Raúl Cardillo.

El dueño de la funeraría se había ido adaptando a los tiempos.
Desde que comenzara,siendo un jovencito de dieciseís años a trabajar como ayudante en la que era la mejor cochería de la ciudad,en epocas donde todo estaba centrado en la pompa austera,el luto,el duelo,la seriedad casi sombría de las ceremonias hasta la actual donde hasta le había tocado organizar un funeral con musica de cumbia incluída.
Hoy todo era fashion,a la moda comenzando con el cadaver que era maquillado,preservado mediante quimicos para evitar la corrrupción,restaurado para estar presentable a la mirada familiar y dee visitas diversas.
Se había ocupado de formarse con el equipo que fué de avanzada en el país,que trajo estas practicas antes desconocidas.Tanatopraxia,tanatoestetica y la carrera terciaria de Director Funerario.Cientos de personas,jovenes mujeres,se interesaban por estos temas.También por las carreras de auxiliar forense,aunque estas disciplinas nunca hubiesen llamado su atención.La omnipresente muerte estaba de moda en su aspecto mas banal y externo.
Se sentía cansado,quizá se jubilara en poco tiempo,quizá ocupara esa sencilla caja oblonga blanca que tenia elegida para sí mismo desde hacía un tiempo.
Continuaba viviendo en el departamento situado en el piso superior a la funeraria original,de las otras sucursales se ocupaban sus gerentes e incluso de esta misma tenía personal de confianza en que delegar las muchas tareas.
Vivía solo y decidió que alguna persona podía ocuparse de las tareas hogareñas.
Colocó avisos pero las postulantes no llegaron a agraderle del todo.Fué entonces cuando reparó en una vivaracha morena que había ingresado poco tiempo antes para limpiar las salas velatorias.La entrevistó,ofreciéndole trabajar en su casa,con vivienda si lo deseaba.
La joven aceptó.Vivía sola,alquilando en un barrio un poco alejado,así que era muy conveniente para ella el arreglo.Ganando un poco mas de sueldo.
Todo funcionaba a la perfección,el dueño de casa estaba muy satisfecho.
La habitación de la mucama tenía una pequeña ventana que daba justo a l deposito de ataúdes,nuevos.Le preguntó si no le resultaría un poco chocante y su rápida respuesta fué que no que esos temas le encantaban.
Poco tiempo después el hombre comenzó a sentirse mas débil y agotado,por lo que se jubiló,pasando gran parte del día en su casa,dormitando o leyendo algún libro.Sus noches eran mas agitadas.
Las vivía como muy movidas,con inquietud en su cama,sueños casi lucidos.Sin embargo al despertar encontraba el lecho en perfecto orden.
Comenzó a sentirse avergonzado,ya que el un hombre de setenta años tenía un solo tema como sueño.Al principio de una manera difusa,luego con mayor nitidez,casi como se dijo,como un sueño lucido pasaba las noches teniendo sexo con su joven empleada.Preocupado porque esto ya era una obsesión,pensó que consciente o no se había excitado demasiado con la joven mulata,de hermoso rostro y cuerpo perfecto.
Se agregaron hechos mas extraños aún.Un persistente olor a velas,a almizcle,a alguna esencia extraña en su habitación cada mañana.Y la debilidad que lejos de ceder,se incrementaba.
No se preocupe señor,yo lo atenderé,fuí enfermera en mi país caribeño.
Todos los días le traía una especie de leche con especias,exquisita y una sopa mas rica aún.El sopor persistía y alarmado comprobó que se su debilidad llegaba casi al punto de la inmovilidad.
Las veces que se miró al espejo se vió tan consumido como sus clientes de la funeraria.
Pensó llegado el final y no estuvo desacertado.
Ya no hubo frontera entre vigilia y sueño.Todo era ahora.
Extraños dibujos en rojo llenaban la pieza.Velas negras y rojas ardían en los rincones.Pebeteros de perfumes exóticos sahumaban todo.
Pertenecemos a una antigua estirpe.Una evolución,un plano diferente al humano.Nos alimentamos de energía.Puede ser la vitalidad de una persona joven o también una energía mas densa,oscura,negativa.La llamamos la negritud.
Tu una persona anciana has acumulado negritus,fuerza negativa a lo largo de tu vida.Aunque nunca lo hayas sospechado,ni sentido,ni visto de manera alguna.Tu trabajo,cerca del dolor y la muerte ha ido colocando sobre tí capas y mas capas de lo negro.
Mientras inhalaba mediante el postrer acto sexual,el ultimo soplo del viejo alcanzó a decirle.
Los demonólogos medievales,nos llamaban SUCUBOS.