El reloj dio las 20 hs, habían pasado demasiado tiempo esperando, el estaba a su lado… ella tomo el lápiz labial y lo paso por su boca…se miraron a través del espejo…el tomo su celular y su agenda, cerraron la casa, subieron al auto que los llevaría a la ciudad a sus respectivos trabajos, la niebla era intensa, de pronto algo paso, el transito se detuvo y se escucharon las sirenas, no saben cuánto tiempo estuvieron allí,parados,hasta que el tiempo transcurrio y como ya se había hecho tarde debían regresar a su casa y así lo hicieron.
Al ingresar a la vivienda, se sorprendieron al ver que en el escritorio estaba la agenda y el celular, extrañados subieron a la planta alta y en la mesa de noche el lápiz labial como ella lo había dejado junto al espejo, se miraron al oír las voces que venían de la calle, ,escucharon llantos, eran muchos, bajaron desesperados las escaleras intentando preguntar qué había pasado pero no tenían vos, sus niños lloraban y fueron retirados de la casa, el resto de la familia buscaba algunas cosas como documentos al menos eso parecía ,asombrados vieron como el hermano de el tomo su celular y la agenda, la madre de ella el lápiz labial que se encontraban en la mesita del living, luego de una rato toda aquella gente sin siquiera haber notado sus presencia se retiraron vestidos de negro luto.
Después, la puerta se cerró.
El reloj había dado las 20 horas…, ella se miraba en el espejo, tenía en sus manos el lápiz labial, el permanecía a su lado, ambos bajaron al living, se miraron… esperándolos habían perdido la noción del tiempo, ya deberían estar allí.
El silencio que había entre los dos aumentaba la ansiedad. No dejaban de caminar por la sala, el encendió un cigarrillo y ella se angustió aún más.
El uniformado golpeo la puerta y les dio la noticia, los niños, su abuela y su tío tuvieron un accidente en la carretera, todos murieron.
La mujer subió las escaleras, al ingresar al dormitorio comprobó que en su mesa de noche estaba el lapiz labial junto al espejo.
El hombre ingreso a su escritorio y allí estaba su celular y su agenda.
Entonces lo entendieron todo.
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