Soy así tal cual me conoces cuando amo entrego todo pero mi corazón se queda conmigo. Todo lo que pasa en nuestras vidas tiene una enseñanza la vida sigue pasando y sigo sin entender lo que debía aprender. Personas llegan a mi vida y personas salen de ella unas se quedan por algún tiempo, mostrándome el poder del egoísmo, el poder de la envidia, el poder para odiar o amar; esta en mi decidir que sentimiento se queda y cual se va. Me intoxico pensando en el que dirán, en lo que quiero y no puedo tener, en todo lo que tengo que hacer para que los demás sean felices. A veces me detengo a pensar en lo que realmente quiero pero es mejor seguir intoxicándome. Nací llorando solo para vivir y en ocasiones sigo llorando para no morir. No puedo ver ni sentir lo que otros ven y sienten ellos están en su mundo yo estoy en mis asuntos. El hecho de amar y querer a alguien no quiere decir que me amen y quieran con la misma intensidad; dar todo por amor no siempre significa que otros hagan lo mismo por mí. Llega un momento en que la vida me pesa; el caminar, ver gente y saber que hay quienes les pesa más, me libera un poco de la carga. No sonrió con mucha frecuencia, pero cuando sucede disfruto cada segundo. No creo en la felicidad porque la felicidad para mi es estar al lado de alguien que este en sintonía con mi cuerpo y mi alma; solo creo en los momentos perfectos. Cada día me repito lo mejor está por venir pero solo vienen los días uno igual que el anterior. Si me quieren bien y si no también nada cambiara en mí, ya no soy un niño no tengo nada nuevo que aprender, lo que sé, es porque lo he vivido y lo que no lo he copiado de enseñanzas ajenas. Y sigo caminando porque la vida me sigue pesando...