Cansada de sufrir por ese bastardo
deje todo y prendí fuego a la casa
deje los sueños, mis versos, mi amor
lo deje en el rincón encadenado
y corrí para no ver cómo dejaba de latir.
Debe morir, es la única solución,
no más dolor, no más rencor.
Ese bastardo debe morir,
debe de morir junto con los recuerdos,
tus besos, las bromas, y tus celos,
es la única forma en que pueda ser feliz
Lo encerré, lo ignoré, lo quemé,
acabé con el, error crei acabar con el.
Hasta que una noche te extrañé,
y volví a sonreir,
Aquella noche que te busqué y aún latía
esa noche me di cuenta que no murió,
solo esperaba para que lo matarás tú;
Espero pacientemente tu humillación,
tú inmadurez y tú rencor
hoy a muerto, no te preocupes más
hoy lo has asesinado, ya no latirá
este amor tan inocente
dice adiós a tu maldad.