Porque existes, crecen las flores
y beben los colibríes su almíbar
la hierba verde refresca mis pies
y mi camino se aligera a tu lado.
Para tí, he pintado una mesa gigante
de madera, de un árbol caído
le he dado vida cada día y la he vuelto
a llenar de sonrisas y alegrías
¿Hay un horizonte, allá en el infinito?
que sigue sin perderse al otro lado
vamos…ven conmigo ahora
porque existo y existes en mis latidos.
Porque existes, siembro mis huertas
muevo la tierra y pongo las semillas
las piedras no estorban, son parte del camino
y me guían por senderos recorridos.
Lléname de amor esta mañana
abrázame a tu pecho sin medida
pásame la fuerza de tu vida
hazme infinita entre tus brazos.
Porque estás, la soledad está prohibida,
la poesía es la anfitriona y el tiempo no importa.
Los árboles cambian sus hojas, paren nuevas flores,
las ballenas llegan y se van, y tu existes.
Mío, mi amor, tus manos, tus ojos,
no hay fantasmas, no hay miedo, no hay oscuro.
Haces café, abres el mar y enciendes fuego,
porque estás y existes, nuestra casa se llena de estrellas.
En medio del camino, te vi, me encontraste,
subiendo con la carga, aunque fuera nada,
toma mis brazos, dijiste, son tuyos
abrazos que sostienen, silencian y dan calma.
Es que existes, ya lo sé, y vas entrando en mi vida
cada mañana con tu beso y con el pan.
con las rosas que podaste en el camino
y con el alma abierta para mí.
Porque late mi pecho, estás aquí, yo sonrío y miro a la ventana,
a través del cristal, tu figura que me llama…tu espalda
y deseo hacerme carne de tu carne
y deseo embriagarme con tu boca.
Es la calma de que existas y que estés
rodeando mi cintura con tus brazos, es
la esperanza infinita de tu sombra constante
si te marchas mutilando primaveras.
Es que existes cuando tiembla mi vientre,
los jilgueros anidando entre las ramas
las entrañas se despiertan con tus cantos
y vuelve la vida a mi alma.
Estás ahí, con la bandera y tu grito de batalla
porque existes, porque piensas, porque cantas a la libertad
el campo es verde y tu voz es fuerte, como tormenta
vibran mis cuerdas con tu mano izquierda.
Los sueños se pintan cada mañana y los vives
conmigo, vivo mis sueños contigo
entras y sales, salgo y entro
y en el medio del camino nos topamos
nos encontramos, nos abrazamos, nos amamos
para siempre me dices, y te creo y te quiero
y te espero cada tarde con mis brazos
a puerta abierta, el café y el pan caliente.
Porque existes, cantan los pájaros, abren las olas sus brazos
salpican las gotas de lluvia en las piedras de nuestra casa
y los geranios se enamoran dos veces, otra vez…
No hay espacios sin ti en esta casa, la roca, el agua,
la tierra húmeda del jardín te llama en la mañana y tu avanzas,
siembras maíz, siembras flores, siembras amor en mi espalda.
La mesa grande se llena, los tuyos, los míos, todos
llegan el vino y los manjares, con cariños, música y abrazos.
Porque estás, esta casa es de libros, colores y música,
es de acordes y especies, es de piedras y palos.
para ti he pintado en un papel un caminito, con abrojos a los lados
para que llegues silbando las canciones más bonitas.
Porque existes, hay un horno, que calienta cada día
vibra y hace felices a todos. Para mí vas a hacer pan en la mañana
sembrar romerito y salvia en los senderos, por que existes.
Tu guitarra suena como el mar, arrulla el viento y silba la selva,
porque existes, sueña en mi oído cada día y cada noche como amor.