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Lucifer
caí a la tierra por mi mismo
por mi propia voluntad
ni mi insolencia desafiante
quebró la indiferencia de Dios
harto de Su Silencio
y lo que interpretaba
como Suprema Arrogancia
Pase mucho tiempo solo
hasta que descubrí a la gente
ame, odie e hice amigos
un día descubrí
que mis brazos podían
empuñar espadas o arados
y sembrar de sangre o semillas
las tierras
la sangre siempre pedía más sangre
pero las semillas tan solo trabajo
no abandoné la espada
porque quien no cuida lo suyo
nunca tendrá nada
pero aprendí a mostrar
mas que a usar
para disuadir a las fieras
No envejecí, no podía
no me era dado ser mortal
pero aprendí a guardar en canas
cada cosa aprendida
con cada día el cielo
se hacía mas lejano
y la tierra mas cercana y tibia
y aprendí a reír
y a llorar
y a abrazar
y olvidarme de mi
en los ojos de ella
y de mis hijos
y cuando ella se extinguió
por primera vez quise morir
y esa fue la segunda gran lección
de mi inconmensurable vida
no se puede estar vivo
sin tener miedo a la muerte
Ese día mi alma sangró
y una espina hirió mis dedos
y supe que mis hijos
me verían abonar la tierra
y el alivio infinito
de ya no padecer las eras
se confundió con las lágrimas
el miedo y la espera
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Texto agregado el 03-06-2019, y leído por 95
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