Hoy no quiero levantarme, ya no quiero despertar,
ya no logro soportar esta vida miserable,
en la que soy el culpable de todo lo que me aqueja,
en la que el dolor refleja mi más cruda realidad.

Tan cruda que ni la muerte sería la mejor salida
para curar esta herida que en mi corazón habita,
que me duele y debilita, que me deja ya sin fuerzas,
tan profunda y tan abierta que me consume la vida.

Solo sé que no hay razones, que ya no existen motivos
que logren que me convenza de tomar otro camino,
que no sea el del letargo de un espíritu afligido
que solo sigue durmiendo sin recuerdos, sin olvido.

Ya no quiero esta tristeza, ya no quiero esta agonía,
que me consume de a pocos, que me arrebata la vida,
que me golpea tan duro, con dureza desmedida,
dejando mi alma golpeada, destrozada, corroída.

Dejen que siga durmiendo, que de los sueños soy amo,
que mientras duermo soy rey de lo sagrado y profano,
que puedo volar al cielo y de bajar de allí caminando,
sin sentir que mientras sueño, mi vida se va quebrando.

Y se quiebra por tu ausencia, por sentir que ya no estás,
porque siento que tu aroma se perdió y no volverá,
por tu ausencia que enfría mi alma y me desgarra por dentro,
no sentirte hiere más que mil puñales en el pecho.

Quedó decidida mi suerte, no despertaré jamás!!
seguiré dormido en vida, sin deseos de despertar,
deseando verte en mis sueños, deseando verte pasar,
estaré por ti esperando, hasta nunca jamás...