Este país es una anomalía histórica, esta construido sobre el silencio. El silencio impuesto de los vencidos e imponente de los vencedores.

No hay precedente histórico como el español. Los vencidos pedimos perdón a los vencedores, que encima presumen de habernos dado una porción de seudodemocracia, que tenemos que agradecerles. El Estado es patrimonio de ellos.Nunca tendremos derecho a gestionarlo, a cambiar su modelo, puesto que los regalos si se admiten no se discuten.

La España del silencio infecto y olvido institucional, de la abyecta reconciliación impuesta por los verdugos. No podemos exigir nada, puesto que perdimos.

Puta transición, llena de nuestra sangre para una reforma que nunca quisimos. Queríamos ruptura que quizás no pudimos conquistar porque éramos los que éramos.

Pero que quede claro que dijimos bien claro que esto iba a ser la consecuencia.