Hacer las cosas bien en contra de tus beneficios, cuesta mucho.

Dar más de ti que recibir remuneraciones, es quizá desalentador.

Mirar más hacia el horizonte, en vez encerrarse en un mundo material.

Extender las manos al cielo y darlo todo, dice más de ti que cualquier palabra.

La bondad de tus palabras, contra la soberbia y el abandono.

Sanar el dolor, aliviar las penas, ser perseverante, es lo que le falta al mundo.

La humanidad se ha perdido, quiero recuperarla.

Sé más como tú, y menos como los demás, quizá así seas más feliz.

Quizá nunca será suficiente, pero alimenta el alma.

Una religión no es necesaria, ni te hará el más ético ni el más moralista.

Nunca seas egoísta, no te guardes todo para ti, compártelo.

Tú no eres el único que tiene sueños, muchos lo tienen y quizá seas tú quien los haga realidad.

No se necesitan hijos para ser feliz, no existe tal "ley de la vida"

Ama, por sobre todo ama, nadie ha muerto nunca por dar amor.

Se paciente, tolerante, ten calma, aunque a veces la pierdas. Recupérala y se fuerte. No muchos apoyarán tus convicciones.

Sonríe, sonríe amplio… aunque nadie entienda el motivo, aunque no seas feliz.

Atesora los momentos, quizá sea lo único cierto que poseas, tanto como el conocimiento.
Puede que esa fuese mi manera de resolver la ecuación de la vida, puede que haya encontrado el acertijo para ser feliz y no me haya dado cuenta. Luché, pero no fue en vano… más allá de mis intereses, más allá de lo entendible. Y quizá, cuando mi cuerpo yazca en el féretro y nadie se acuerde, aun mantenga una sonrisa en el rostro, porque estoy satisfecha de mis acciones. Aunque vuelva a nacer, volveré a ser mil veces como soy ahora.

Ojo: No se necesita una religión para ser feliz, “porque quien necesita una religión para tener moral, es como un perro amaestrado. Gandhi”.