Mi poesía flota en las aguas de la desilusión,
la tristeza cierra el telón finalmente,
las esperanzas duermen en casas ajenas
y el fuego apagadizo esparce
las cenizas de una incierta nostalgia...
Algo dentro de mí está muriendo...,
lo sé y lo asumo...
Miro al cielo y sonrío levemente...
Paz... Gracias...
Decepción de una mirada
furtivamente desengañada,
desandando mi camino mientras
te espero sabiendo que no vendrás.
notando tu congelado recuerdo
que me sonríe con mis propias ilusiones,
que juega sin jugar con mi destino,
que ignora el silencio de mis lágrimas,
que sabe que no me ve cuando me miras...
Tu alma me pidió ayuda,
quería las alas que tu ilusión
buscaba cada mañana al despertar...
La sentía buscándome
en la oscuridad de la nada,
allá donde no hay recuerdos
ni imágenes preconcebidas...
Y yo la acariciaba tímidamente
para no espantarla...
En tu noche larga, me visitaba
dejándome sentirte viva,
sintiendo lo que vivía en mí...
Lejos o cerca... En cuerpo o en alma...
Me ahoga tu adiós en silencio,
tu sentida despedida sin nombre,
tu silencio poblado de frases vacías
porque tus sueños no viven en ellas...
Pero quizás así, esta vez...,
apueste por mí...

(27/12/03)