Hace muchos años fuiste el hombre de mis sueños.

Han salido miles de lunas llenas hombre de mis realidades.

Tantos amaneceres convivimos hombre que no lo supiste cuidar.

Compartimos miles estaciones del tiempo hasta que su importancia se esfumó.

Daba lo mismo que el jardín perfumara de azares o lavandas.

Nadie se digno a ver la desnudez de los árboles ni las hojas secas arrumbadas.

El frío un día se hizo sentir con más rigor.

Acaso sería que a vos se te había agotado el amor.

Tal vez fue que nunca lo sentiste el garrón fue que me di cuenta al fin.

Abrí la puerta con decisión endurecí el alma aprisione el corazón.

Nuestra vida juntos había culminado ya no brillaría como el sol.

No escucharemos nunca más el canto del ruiseñor.

Entre tus trapos te llevaste mis ilusiones las que eran de a dos.

Encerradas en tu radio cargabas palabras y algunas canciones de amor.

Noches de lagrimas de dolor, de pena, de indignación.

Días de voluntad, de energía, de constante dedicación, valiente buen humor.

Hombre de mis sueños solo eres un extraño hoy.

CAL.COR