“Me llamaron loco, y yo les llamé locos,
y, maldita sea,
me ganaron por mayoría de votos”
Nathaniel Lee
Siglo XVII

Una piedra en la cabeza, una condena del alma, una conducta antisocial... cada una de mis actitudes tenían un nombre... ahora, inventaron una palabra que las reemplaza a todas... esta palabra se ha convertido en sinónimo de condena y, lógicamente, si hay condena habrá un culpable también, ésa soy yo... y ellos, jaja, ellos son los inquisidores, aquellos que después de cinco años de estudio y un simple papel firmado usado como capa, tienen como misión librar a la sociedad del mal...
Nos tildan de locos, excéntricos, raros, maniáticos, idos, trastornados, perturbados, desequilibrados... y así puedo seguir perdiendo mi tiempo en nombrar todos los descalificativos (o grandes calificativos para algunos) con los que la sociedad nos identifica...
Pero quién decide quien está loco y quién no, es una intriga tan infinita como el gran dilema del huevo y la gallina... sólo porque los locos somos minoría, no hay porqué pensar que somos nosotros los salidos de reglas, quizás éstos sean los demás y nosotros seamos los que vivimos cómo se debe... quién es más loco, aquel que vive a su manera, sin molestar a nadie, con sus propias reglas, sin importarle los que digan los demás, sin hacerse problema por nada... o aquel que sigue cada una de las reglas, abrumados de tantos ruidos molestos para ellos, trabajando de lo que no les gusta, pagando los errores del gobierno con su propio sudor, siempre insatisfechos por su forma de vida... Entonces, quién es el loco?? Quién encontrará la felicidad más rápido... creo que es algo demasiado obvio y que nadie quiere ver... quiénes son los insanos?? Aquellos que siguen al sistema al pie de la letra, destinados a ser infelices el resto de sus vidas, y encima de todos sus problemas, se dejan un tiempito para criticar a los locos, aquellos que viven como se les antoja... aquellos que solo desean ser felices a su manera... para algunos la felicidad sólo se trata de vivir toda una vida de tristeza, pensando en un amor perdido, en un amor que nunca volverá... a mi modo de ver las cosas, esa es la locura más hermosa, y la felicidad más añorada... alguna vez leí: “La felicidad es sólo una ilusión, llenada con tristeza y confusión”... seamos honestos, nunca llega a ser feliz aquel quien vive siguiendo un patrón, y esto me hace recordar un viejo aforismo que dice: “Sólo el pez muerto nada con la corriente”. Y sé que muchos “cuerdos” pensarán, esta niña rebelde nos quiere convencer de vivir en anarquía, y no es eso a lo que quiero llegar, pero bien, no me voy a hacer problema por eso , porque sé que quienes realmente tienen una mente abierta saben a que me refiero... y a aquellos que piensan vivir en anarquía, todo bien, pero piensen una cosa, uno grita ¡Viva la anarquía!, hasta que un día vienen y violan a su hermana...
Y llega un momento en nos creen una amenaza para la sociedad y nos encierran... pero en realidad, a quien amenazamos?? A la sociedad o al sistema?? Y si lo pensamos bien... quién es más libre, aquél que camina por la calle, bajo los ojos asesinos de un gobierno cleptocrático con tendencia vampiresca que no hace más que robarse todos los recursos económicos de nuestro país y nos chupan toda nuestra dignidad, hasta dejarnos flacos de orgullo... o aquel que para los ojos de los demás esta solo dentro de cuatro paredes completamente cerradas, pero en realidad es más libre que cualquier otra persona... es aquel quien encontró lo que todos buscan, ese lugar lejano donde patear todas las mierdas de su mente...
Y si nos ponemos a rever nuestra historia, nos damos cuenta de que nuestro mundo fue hecho por LOCOS... aquellos grandes científicos, escritores, músicos, filósofos, todas esas personas que marcaron nuestra historia de una buena forma, todos ellos eran más locos que cuerdos... y quizás por eso alguna vez leí: un loco puede ver más desde el fondo de un valle de lo que un cuerdo puede desde la cima de una montaña...
Se ha dicho también, que la locura se produce cuando uno termina de entender su principal inquietud, y quizás así sea... porqué me llaman loca?? Quizás sea porque entendí lo que era la muerte... si, a mi manera, pero lo entendí, y tras entenderla, quise tenerla, y ahí comenzó todo... veo en la muerte, lo que la mayoría de las personas no ven... veo belleza, así como la veo en la tristeza, veo romanticismo... y si conjugamos eso... no es el más bello y romántico del mundo aquel quien muere de tristeza?? Y poco a poco, me fui enamorando de ella, esa sensación de serenidad, en un lugar oscuro, mi cuerpo sumergido en la tristeza y la depresión romántica, ese espacio sólo mío, adornado de negras y rojas rosas, esas dulces lágrimas oscuras proviniendo del infinito dolor de mi alma brotando de mi desconsolada mirada... creo que la belleza no va más allá de una lágrima, creo, como dijo Baudelaire, que las lágrimas dan belleza al rostro, como la lluvia al paisaje... ya me veo con esas sedas negras cubriendo mi cuerpo, me imagino corriendo en el oscuro bosque, con esos enormes árboles negros, y una rosa en la mano, escapándome de aquel radiante fantasma que quiere llevarme hacia el otro lado... merezco estar encerrada por esto?? Soy una amenaza para la sociedad?? Sólo soy mi propia amenaza, pero eso a quién le importa...
Otro motivo por el que me llaman loca, es por amar... y eso sí es verdad, el amor es la locura más hermosa y más pura que puede existir... pero nuestra sociedad impone reglas para el amor también, le pone géneros, colores, razas, edades, etc... eso sí es una locura insana, una ridiculez... me juzgan por amar a las personas como personas, más allá de su sexo, de su edad, su raza, su condición física, su situación económica, nos reprimen tildándonos de enfermos pervertidos... sólo se trata de amar, cómo alguien puede juzgar eso?? Y bueno, nuestra “perfecta sociedad” da para todo señores...

Por otra parte, los inquisidores tratan de opacar nuestra loca felicidad con violentos encierros, “terapia” electroconvulsiva, camisa de fuerza, castigos, psicofármacos anestesiantes, etc. Con el fin de aniquilar las ganas de vivir de otra forma que no sea la impuesta por el sistema social en que vivimos... entonces, quiénes son los desquiciados?!
Y sigo recalcando que el sistema social (capitalismo y patriarcado) es directa o indirectamente el generador del sufrimiento de la humanidad... y es la humanidad la que debería ser directa o indirectamente el generador de su propia libertad, de su propia felicidad, sin que ningún otro individuo lo señale con su maldito dedo sucio de hipocresía para después encerrarlo... Y que para que este terrible sufrir no siga avanzando, no tenemos que hacer terapia sino la revolución... y a causa del odio y la impotencia que este tema me produce, podría llegar a decir que tendríamos que salir a patear el culo de todos esos desgraciados que no nos permiten vivir nuestras vidas independientemente de su intereses... pero soy una pacifista, y creo que hay formas mejores de demostrarles que están equivocados... ellos no son menos locos que nosotros... nosotros tenemos una sana locura que nos lleva hacia la olla de oro al final de nuestro arco iris, y es sana porque somos lo suficientemente libres como para sacar nuestra locura a la superficie... ellos, en cambio, reprimen tanto su locura que comienzan a enfermarse, y ésta que en un principio era tan sana e inocente, comienza a ensuciarse, se convierte en una locura malvada, insana, reprimida...
Defendiendo mi libertad individual, y sabiendo que su vivencia va en contra de lo establecido, sólo opondré pacíficamente a aquellas estructuras de poder que dicen tener una justificación legal para reprimir o perseguir a personas que llevan un funcionamiento que no corresponde a lo establecido... (y vuelvo a aclarar, no estoy defendiendo una anarquía, sino una libre práctica de nuestra inofensiva locura).
Y si observamos bien a nuestra sociedad, podemos ver que hay millones de locos libres e inocentes, y éstos son los niños, y no hay locura más sana e inocente que la niñez... hasta que comenzás el colegio, y ahí aparecen por primera vez los inquisidores, disfrazados de “segundos papás o mamás”, que nos empiezan a imponer un estilo de vida basado en un plan fascista totalitario... de vez en cuando te cruzás con un hermoso impostor, aquél que para los inquisidores es uno más de ellos, pero en realidad es un loco mas, con un espíritu libre como el nuestro, que trata de hacernos ver cómo son las cosas, nos ayuda a mantener con nosotros nuestro tesoro más preciado: nuestra locura... y todo esto, a través de una valiosa herramienta, llamada arte, y ésta, puede estar bajo el nombre de música, literatura, plástica, etc... es una lástima que éstos hermosos impostores son muy pocos, y a veces los niños, tentados por falsas esperanzas dadas por los inquisidores, no hacen caso a estos poseedores de espíritus libres...
Saben qué?? Estoy infinitamente orgullosa de mi locura!!