Mi vida sin tu amor parte 7
37 años después…
-Fernanda, hay un señor de 86 años que tienes que ir a ver – le dijo Paola enfermera del servicio de terapia intensiva
-¿quién es? – Fernanda es una doctora muy ocupada.
-un señor con EPOC. Está en terapia intensiva y al parecer ya no hay nada que hacer
-está bien –dijo Fernanda revisando unos expedientes - en un rato paso a verlo.
-¿qué tienes? – pregunta Paola
-ayer discutí con Víctor por lo de la boda – se lamenta la doctora.
-¿qué pasó?
-yo me quiero casar y no hay dinero para a boda. Dice que es lo único que me importa.
-no creo que sea eso, simplemente tienes la ilusión de casarte.
-¿en qué cama está el señor? – Fernanda no quería tocar ese tema.
-en la 330
La esposa de Jairo había muerto muchos años atrás, su hija creció con él. Mary su hija era psicóloga y sabía todo sobre Gilberto. Mary le había conseguido la dirección en donde vive Gilberto pero su padre nunca se atrevió a tocar a la puerta. Mary nunca juzgó la sexualidad de su padre, y le aconsejaba aceptarlo sin tener que dar explicaciones.
Jairo se lamentaba el haber aceptado aquella propuesta que lo obligó a separarse de lo que él llama el amor de su vida.
-¿qué pasa con mi padre? – pregunta preocupada Mary
-tengo que ser honesta, el padecimiento avanzó en poco tiempo, clínicamente no hay nada que hacer por su padre. Lo único que podemos hacer son los cuidados paliativos pero aquí no tenemos el personal adecuado.
-¿entonces? ¿Me está diciendo que me lleve a mi padre a morir a mi casa?
-no, déjeme terminar. Soy la directora de una clínica que ofrece cuidados paliativos y apoyo Tanatológico para la familia. En ese lugar lo podemos atender.
-perdón por actuar así, pero mi padre en lo único que me queda.
-lo siento de verdad. – le expresó Fernanda su pesar a Mary. -la dejo con su padre y piense mi propuesta
-¿papá? ¿Estas despierto?
-claro – dijo Jairo con miles de culpas encima
-la doctora nos ofrece llevarte a una clínica de cuidados paliativos.
-confió en ti hija. – le dijo Jairo tomándola de la mano.
Continuara…