Mi vida sin tu amor parte 6
Así pasaron 10 años más juntos. Viajaban por el país, podían besarse sin ningún problema, nadie los conocía.
Se amaban con intensidad, cada noche que pasaban juntos era explorar cosas nuevas, las caricias, los besos, las palabras de amor, nadie podían separarlos…
¿O sí?
En el hospital, Jairo fue creciendo como la espuma, todos los residentes que trabajaban con él lo admiraban, otros médicos le aprendían sus técnicas en medicina herbolaria. Nadie en el hospital, tenía los conocimientos de Jairo.
Pero los problemas llegaron a la vida de la pareja, en el hospital una enfermera enamorada de Jairo sabía de su relación con Gilberto y pensaba decírselo al director del hospital.
-tengo pruebas de que usted mantiene una relación con un hombre – le dijo Sandra la enfermera
-eso a usted no le importa. Mi vida personal es personal. No se meta –le advirtió Jairo.
-no me amenace, usted es solo mío y si no es así, no es de nadie más.
-lárguese de mi vida y déjeme en paz y le advierto, a él no se acerque, ni se atreva a llamarlo, él es mi compañero de vida y yo estoy aquí para defenderlo.
Pero las cosas cambiaron para la pareja. Sin entender lo que pasaba, un día Gilberto al llegar del trabajo vio que las cosas de su novio no estaban, Jairo había tomado sus cosas y desapareció para siempre. Gilberto se fue de la ciudad, le buscaba una explicación la situación, Jairo ya no estaba en su vida. Aquella enfermera separó a la pareja…
En 1972 Jairo se casó con una colega médico que tenía un consultorio cerca de su casa. Nunca habló de Gilberto con su esposa, pero con su hija si, ya que un día vio las cartas que le escribió a Gilberto y que nunca le envió, las fotos que se tomaron el en rio y aquella casa en el bosque.
En 1974, Gilberto regresó a la ciudad tratando de sanar sus heridas. Todos los días extrañaba a Jairo, trataba de ver a otros hombres, amarlos pero ninguno era como Jairo.
Continuara…