Cuando siento que me hundo en la angustia,

que busco salidas y nos las encuentro por ningún lado,

siento que el cielo me manda su ayuda,

haciendo renacer en mi esas ganas de seguir,

de valorar todo lo que tengo y de todo lo que puedo crear.

¡ cuando siento soledad !

Del cielo me hacen ver todos los seres que quiero,

haciendo desaparecer esas sensaciones equivocadas,

brota en mi ese caudal de amor que vive por los que tanto cariño tengo,

haciéndome sentir la persona más acompañada de la tierra.

¡Cuando los recuerdos de tantos sufrimientos me rodea!

El cielo viene a mis rescate haciéndome ver que de todos ellos he aprendido,

a ser la mujer que soy hoy llena de defectos y de alguna que otra virtud,

pero de buenos sentimientos.

¿Para qué vivir me pregunto?

El cielo me hace tomar conciencia de todo lo que me falta lograr,

pequeñas grandes conquistas que son las que motivan a seguir viva,

tantas cosas que descubrir y caminos no recorridos,

me estimulan a continuar pero con más ganas para poder disfrutarlo.

¡Cuando siento que me ahogo en lagrimas!

Bajan del cielo sonrisas que me hacen reír a carcajadas,

pasan cosas que estimulan mi alegría,

¡renace mi pícaro carácter!

haciéndome divertir de todo lo que pasa a mi alrededor.

Dios ángeles del cielo no me han dejado nunca,

compañeros inseparables a lo largo de mi vida,

cada paso que he dado siempre lo sentí junto a mi,

la sabiduría fue aprender a escucharlos,

entregarme a su guía incondicionalmente,

¿ cuantas veces me habéis levantado ?

¡con cuánta ternura me han consolado!

¡el cielo me protege!

CAL.COR