UN SUEÑO LLAMADO GABRIEL

El 17 de abril del 2014 me encontraba acostado en el sofá de mi casa esperando a que mi mente se iluminará, para así dejar marcado algún papel por el cual me recordaran. Mientras esto ocurría miraba por la ventana que da paso a la calle, viendo tras ese vidrio un día que se iba oscureciendo con cada parpadeó, en un instante todo se oscureció a mi alrededor. Me encontraba en un mundo extraño, en el fondo de este lugar una luz apareció rompiendo el viento con sus alas, paro frente a mí. De repente, sentí un toque en mi hombro, gire mi mirada muy suavemente hacia atrás, vi un hombre de aproximadamente 1,68 cm de estatura, con bigote poblado, con unas gafas sostenidas por una nariz en curvada y puntuda, baje la mirada de nuevo y en su pecho se encontraba una mariposa amarilla que brillaba, entonces me di cuenta que era Gabriel. Le quite la mano de mi hombro.
– ¿Gabriel estoy muerto? -, aún yo no sabía la noticia del día.
-Creo que no Mario-. Con una sonrisa en su rostro.
Voltee a mirar a la luz que cada vez estaba más cerca, Gabriel me pregunto:
- ¿Acaso viene contigo?
La luz se paró frente a nosotros y se fue convirtiendo en un búho, este comenzó a hablarnos, me quedé mirando a Gabriel y le dije:
–No me dejas de molestar ni muerto-. García me miro y se río.
El búho con una voz contundente dijo –se preguntarán ¿Por qué están aquí? -Nos miramos, yo no sabía si pegarle un puñetazo o darle un abrazo, ya me tenía arto con su risita. Mientras que él se burlaba de mi expresión, el búho siguió hablando:
-Están aquí porque ustedes son los encargados de encontrar los dos pájaros y redactar sus memorias. -Yo había leído sobre ese mito, recordaba que trataba de dos pájaros hermanos separados por… ¡Rayos! nunca me olvido de algo que he leído, ¿qué me pasa?, Gabriel me pregunto:
–Sabes de qué se trata-. Para no quedar mal le dije:
–Claro o que pensaba-. Le replique al búho:
- ¿Por qué nosotros? Me hubiera llamado a mí solo-. El búho contesto:
-simplemente son los elegidos por los pájaros, para salvar los mundos hay que cumplir los deseos de estos dos, ¡Quién los entiende!
El búho se escuchaba muy serio mientras nos entregaba un lápiz y una agenda, empezaba a entusiasmarme, mientras que mi compañero de equipo, que no lo pasaba y creo que él tampoco, se encontraba riéndose, (ya me tenía arto ese bigotón), como haría para trabajar con él de nuevo, ¿recordaríamos los tiempos de juventud?
El ave abrió un sendero de luz en la oscuridad y entramos allí. En aquel lugar nos encontramos con una ciudad que conocíamos, era similar a Cartagena, sino que había un gran problema, todos los habitantes eran animales. A simple vista, dos tigres con uniforme de policías de tránsito, estaban con un jabalí, que era un concejal manejando en estado de embriagues. Nosotros nos acercamos, debido a lo sucedido con el búho nos imaginamos que todos ahí podían hablar y entendernos, entonces Gabriel les dijo:
-Muy buenos días o noches…- Los oficiales le contestaron el saludo, aún no nos miraban, estaban entretenidos poniendo la multa, Gabriel pregunto:
- ¿Señores oficiales por casualidad ustedes saben dónde se encuentran los pájaros? - Un oficial respondió:
-Lo lamento estamos un poco ocupados-, y nos miraron. Los oficiales y el jabalí se sorprendieron gritando,
- ¡Tal como lo dice la profecía del sabio! -
Nosotros nos hicimos la misma pregunta ¿Quién será el sabio? En ese instante un oficial llamo por su tele comunicador: -central para informar un 2408-, se escuchó un ¡ha…! tras el radio. El oficial se subió a su vehículo y dijo: -súbanse-. Maldición era una moto no cabíamos los tres, pensé yo; pero el insistía –Apriétense que hay cabemos-, pero por ningún motivo subiríamos ahí. El tigre al ver esto llamo una patrulla, llegó en seguida, (que buena movilidad tiene esta ciudad), venia conducida por un oso gordo, el tigre le dio instrucciones de llevarnos a la alcaldía, este arranco y a tan solo dos cuadras nos dejó (que estupidez).
Nos bajamos y entramos, era un lugar amplio y bonito, subimos las escaleras, en el transcurso vimos desde secretarios perros hasta concejales ratas, (esto era un zoológico), cada vez que volteaba a mirar a Gabriel se estaba riendo, llegamos al tercer piso, tocamos en la oficina del alcalde, esta abrió instantáneamente, al entrar una voz nos decía –sintiesen-, no veíamos nada, cuando por fin vimos sobre el escritorio un pájaro azul, -Así que ustedes son Gabriel y Mario, los latinoamericanos escogidos para redactar mis memorias-. Él y yo sacamos nuestras libretas, comenzamos a tomar apuntes. Él pájaro continuo, -bueno lo que quiero que hagan es que escriban toda mi vida, la cual les voy a contar y de ahí me resalten como todo un caballero:
“-Mi nombre es Pablo Pedro Ramírez, pero me dicen Pepe, nací en una familia llena de lombrices por doquier, solo sé que tengo un hermano mellizo el cual odio con toda mi molleja por traidor-. Yo intervine:
– ¿dígame por favor exactamente por que odia a su hermano? -. El ave continúo: -Este canalla casi me quita mi trabajo y mi familia; Primero se lanzó a la alcaldía de Altamira, luego se metió con mi esposa, así queriéndome quitar todo lo que tengo. Interrumpió Gabriel.
- ¿Dónde se encuentra el ahora? -
-supongo que gastando todo el dinero que le quito a mis padres, este desgraciado nos robó y se voló-.
Nosotros nos miramos y pedimos un descanso. Decidimos caminar un tiempo. Después de dar unos pocos pasos vimos a un pájaro rojo sacando comida de la basura. Gabriel me dijo –Te apuesto $50.000 a que es el otro hermano-. Yo accedí a la apuesta, pero con la condición de que nos pagaríamos al terminar este trabajo. No le acercamos al pájaro, el ave intenta volar para huir, pero tenía un ala rota; yo le grite:
- ¿Oye pájaro eres el hermano del alcalde? -.
- Eso dice la sociedad. ¿Y ustedes, cayeron en su trampa? -.
- ¿Cuál trampa? Interrumpió García.
-Pues lo de las memorias es una mentira, él quiere llegar a través de sus escritos a su mundo para así conquistarlo-
- ¡que qué! Dijo García,
-Así es- dijo el pájaro, -nuestro padre el sabio creo un hechizo, por el cual… mejor hablemos en otro lado-. El pájaro intento alzar vuelo de nuevo, pero no pudo, entonces nos pidió ayuda, Gabriel lo alzo y el ave nos guio hasta su casa de cartón, que estaba tras la alcaldía, yo le dije:
-pájaro, pero si tu enemigo es tu hermano, ¿Cómo vas a estar tan cerca?
-Tu enemigo es mejor tenerlo cerca, con eso sabes cuáles son sus movimientos; Mi padre creo un hechizo para que lo escrito se vuelva realidad-. Yo me sorprendí bastante, y le pregunté:
- ¿Oye pájaro lo de la alcaldía y la familia es cierto?
-Claro que sí, pero, al contrario, yo tenía a mi esposa, mi hijo y a la alcaldía, y me los quito, El hizo trampa en las elecciones. Bueno lo importante es que ustedes vuelvan a su mundo lo más pronto posible-. Gabriel me miro y se río, que raro.
-ustedes tienen que sacar el libro de su oficina y buscar la página 153, la cual dice “volver al portal”, ustedes dirán las palabras y ya-. Nosotros entramos a la alcaldía de nuevo, y todos nos miraban extraño, llegamos a la oficina del alcalde y él nos dijo:
-Bueno señores ya descansaron, hagan lo que yo les pido… por su bien-. De pronto entraron dos leones con smoking y nos presionaron contra la silla. Pepe continuo, (bueno si se llamaba así realmente).
-Necesito que me escriban como un ser supremo en esas libretas, y espero que lo hagan ya-
Nosotros comenzamos a escribir en nuestras agendas, cuando a Gabriel se le rompió la punta del lápiz.
- ¿Por qué paras Gabriel? -.
-No podré continuar se me partió la punta del lápiz- el pájaro ordeno a un león:
-traiga al búho, pero ya- este salió; Gabriel estaba libre.
Se escuchó un estruendo en el primer piso, el pájaro le dio la orden al otro león que saliera a ver qué pasaba. Este salió instantáneamente, quedamos solos, Gabriel me miro y se río, esta vez sí le entendía su mirada. Nos lanzamos contra el pájaro y lo agarramos, comencé a interrogarlo;
- ¿Dónde está el libro pajarraco? -
- ¿Cuál libro cretinos? -
-el de tu padre-, interrumpió Gabriel.
De repente dos leopardos y el pájaro rojo entraron por la puerta. El ave roja ordeno a los leopardos que amarraran a pepe; luego se acercó al escritorio y picoteo un botón oculto bajo el pisapapeles, salió un libro del tapete de la entrada. El pájaro rojo lo cogió, busco la página 153 y dijo:
- Gracias, ¿Están listos para volver a su mundo? -, Gabriel me miro y se sonrío (como raro), ya me estaba acostumbrando a su risita. El ave profirió unas palabras, en un segundo nos encontrábamos nuevamente en el comienzo, Gabriel me dijo:
-Gracias Mario, porque me has cumplido mi sueño de mirar la vida desde la muerte-y me abrazo. De pronto vi cuando la mariposa amarilla de la camisa de Gabriel se iba alejando, mientras que mi amigo se iba con ellas. En esos momentos fui despertando, después me levanté del sillón, prendí mi televisor y escuche la noticia del día. “Hoy 17 de abril del 2014 lamentamos la muerte del premio nobel de literatura colombiano Gabriel García Márquez”.