Por un momento el hilo de vida se diluyo en la nada en ese pequeño espacio vital se escapaba en un suspiro... la muerte me tomaba de la mano precisa y dulcemente como esperándome sin ataduras en el silencio trémulo de las horas compartidas entre el día que se abre paso a la noche bordeando, rasgando la medianoche.
Solo me solté a esa sensación de prisión a esa fiebre que atrapaba mi cuerpo y garganta y por un instante que no supe precisar me soltó liberándome pude respirar el aire frío que me tomo aliviando el calor que sentía.
En la noche serena sentí nuevamente el latir tranquilo acompasado de mi corazón volviendo a mi al instante sereno de las horas quedas.
Texto agregado el 06-01-2019, y leído por 245
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Lectores Opinan
02-11-2019
Enamoran tus palabras marted
15-03-2019
*****El cierre que le diste es esperanzador. Solo_Agua
05-02-2019
A veces se siente muy patente ese filo entre la noche y el día, entre la vida y la muerte. Me gustó mucho. MujerDiosa
18-01-2019
El manejo de tus letras me seduce... Siempre es un placer leerte.
Orihlei
09-01-2019
Bello testimonio, caminando sobre el filo de la vida, entre la excitación y la angustia. Saludos, Carlos. carlitoscap