Cosas de la vida.
Eran cerca de las dos de la mañana cuando Juanita la hija de doña Juana regresaba a su casa, su madre la esperaba levantada.
Juanita tenía dieciocho años y tenía novio, volvía del baile de los sábados cuando su madre le preguntó:
___¿Te parece que estas son horas de llegar a casa?
___Mamá, tengo que hablar contigo.
___¿Qué te está pasando? Desde hace unos días te encuentro rara.
___Estoy embarazada.
___¿Qué me estás diciendo? ¿Estás loca? ¿Qué vamos a hacer si se entera tu padre? De seguro te mata!!.
___No te preocupes mamá, voy a abortar, es lo mejor.
___Y ¿Qué dice Danilo, tu novio?
___No sabe nada.
___¿Cómo que no lo sabe?
___No es de él.
___¿Qué estás diciendo? ¡No puede ser, eso es imposible, pero…no entiendo nada de lo que estás diciendo…
___Mamá, con Danilo no pasa nada, me confesó que es gay…
___Pero estamos todos locos!!! Hace más de dos años que es tu novio y recién ahora te dice que es gay….
___En realidad yo ya lo sabía pero él me pidió que no dijera nada, que siguiéramos como novios y que cada uno hiciera su vida, pero me enamoré de alguien y quiere venir a casa a conocerlos.
___Pero digo yo ¿Te volviste loca?¿Cómo le digo a tu padre este embrollo? Y con un hijo en camino, creo que la que se va a volver loca soy yo…
A todo esto sin que nadie lo viera, Don Fermín que había estado escuchando el diálogo entre su esposa y su hija salió muy triste de la habitación contigua, al verlo su esposa se asustó mucho y no pudo hablar pero Don Fermín se acercó a las dos mujeres y les habló de esta manera:
___Este es un día muy triste para mí, crie una hija con valores morales elevados y lo que acabo de escuchar me demuestra que en algo debo haber fallado de lo contrario esto no hubiera sucedido, si, estoy muy triste por varias cosas, es cierto que también es mi culpa, sospeché que Danilo no era lo que se suponía que era y no dije nada pero lo que de verdad me entristece es haber escuchado que quieres hacerte un aborto, jamás imaginé que una hija mía no supiera el valor de una vida y menos aún que no la acepte siendo ella quien la creó, además me acabo de enterar también de lo poco que me conoce mi familia, mi mujer me teme y mi hija me oculta un embarazo no deseado porque también me teme y no creo haber sido ni un mal padre ni un mal esposo. Mi querida hija, también fui joven, y a ti mujer, te pregunto ¿acaso te olvidaste que cuando nos casamos llevabas en tu vientre a nuestra hija?
___Papá, perdóname dijo Juanita con lágrimas en el rostro.
___Mi querida hija, quiero que me presentes al padre de tu hijo, quiero tener una charla con él y con un abrazo la estrechó entre su cuerpo diciéndole:
___Jamás te hubiera perdonado no haberme dado ese nieto, la vida debe continuar y de ahora en adelante, a pensar en el futuro que las cosas de la vida no se arreglan a golpes sino enfrentándolas.
Omenia 26/10/2018
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