Contemplando la luna me iluminó
el brillo de tu mirada observándome,
y mi alma traspasó mis ojos
inundados de tu ausencia...
Tu sonrisa me sorprende sigilosa,
llenando mi alma de nostalgias eternas,
en que vivieron nuestros sueños entrelazados
susurrando ternura mientras te ibas...
Bendición es del cielo tu recuerdo,
como una brisa fresca de verano,
saber que nuestras vidas se vivieron
huyendo de verdades desmedidas...
Amplia verdad que me grita, a lo lejos,
como un barco a la deriva que zarpó
de mi muelle una tarde tranquila
en que mi alma calló su dulce voz...
Mi alma es vagabunda de tu vida
en la que permanece sin lugar,
mientras anhelas un amor sin despedida
sumergido en una indudable amistad...
Pasión que multiplica la locura
que aún cree en la verdad del sentir,
al notar el temblor de tu piel
cuando deseas ver a mi alma gemir...
Y sé que no estás porque estás,
estás y te vas... Te vas y... ¿volverás?
Despedida infinita en que despierto
un sueño que jamás imaginé,
confundido en la noche del alma...,
de tus dudas..., doliendo sin fin...

(10/01/04)