No analices grumete
que solo eres rey
de las amapolas frescas,
mensajero del tiempo.

No analices soldado del ayer
tu camino se pobló de sombras
y nada queda por hacer.

No analices pequeño hombre de la montaña
el sol dejo su huella en tu piel
y lo que digas nada cambiara.

No analices joven guerrero todo se fue a la eternidad
tu espada tu fusil y tu vida.

No analices mujer de mil amores
que todo cambia y eso es presente.

Todos podemos cambiar al mundo sin analizar,
todos nos pertenecemos,
y somos esqueletos en un pasado voraz...