Música desgarradora que pareciera resbalarse
desde el bronce pulido como una lágrima
para llegar a los oídos trepanados por la pena
sones que son la perfecta voz que necesita el alma
para expresar sus devaneos que son sólo gotas
que se bifurcan por las constelaciones internas
como un veneno ancestral teñido de gritos…
Resuena la trompeta venerando nostalgias
dientes albinos que ondulan regaños
y las manos negras como oscuro presentimiento
que resucitan los sones y los espectros
acompasada marcha de esclavos que danzan
mientras su quimera es teñida de notas
chocolate amargo hirviendo en el alma…
Toca el negro su trompeta y deambula en su boca
el jazzístico lamento que oscurece aún más a su raza
Duke Ellington renace lozano tras la languidez
de esa trenza de oro tejida por aquellos labios,
labios que rescatan la voz rasposa de Louis Armstrong
y se retuercen en notas angustiosas que son los quejidos
solemnes de aquellos músicos que tienen en sus manos
la llave mágica que desbasta el alma y acaricia ideales…
Texto agregado el 25-09-2004, y leído por 300
visitantes. (2 votos)
Lectores Opinan
26-09-2004
¿nostalgia? anemona
26-09-2004
Muy bueno...sin embargo me he quedado con gusto a poco. libelula
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login