Cuando yo era pequeño, cerca de mi casa, había un local comercial donde vendían de todo. Desde un colchón, a una bombona de gas butano. El propietario era un señor mayor, por lo menos me lo parecía a mí, que tenía 5 o 6 años. A veces, cuando llegaba un camión, éramos muchos los chiquillos, le ayudábamos a cargar o descargar, y nos premiaba con unas monedas (pesetas con la cara del dictador Franco y una leyenda en el borde "por la Gracia de Dios". Sería por la gracia de las metralletas ¿No?. ¿Maduro no se ha imprimido la suya?, pues cara dura, tiene de sobra) que rápido acababan en el kiosco de chucherías.

El caso es que el hombre había sido legionario. Por aquellos tiempos, los tatuajes en España, sólo los llevaban expresidiarios o legionarios decía mi padre. Y así era. En la España de la dictadura, estaban prohibidos para policías, guardias civiles, militares...y muy mal visto, si querías encontrar trabajo. Tras acabar la dictadura. Mejor dicho, tras la muerte de Franco. Murió en la cama, no se olvide. Ahora es fácil ser antifranquista. Muerto el perro se acabó la rabia, no lo digo por ti, Merlín. En aquellos años, la Iglesia incluida, eran millones los simpatizantes, los que cobraban del régimen o hacían negocios, y cuyos HIJOS sin ser becados podían permitirse el acceso a la Universidad. Muchos de sus hijos o nietos, ahora dicen ser comunistas, progresistas... en psicología -creo- le llaman "matar al padre" ideologicamente hablando. Pero con la cartera llena de €uros, y una educación privelegiada de pago, gracias al abuelo

Obvio es; que salvo excepciones, todos tenemos dos abuelos, y nos acordamos del que nos interesa según para qué. Puede que incluso muchos fueran rivales en la guerra (y supieron "perdonarse" y disculparse. También hay que pensar, en una Guerra Civil, no se pregunta en qué bando quieres estar. Llegan las milicias a un pueblo o ciudad, y te reclutan para su lado. Si te niegas, directamente te fusilan ¿el motivo?, cualquiera es válido. Miles huyeron, escaparon, se exiliaron...

*****

Así, así... cosas del progreso. Pasamos a otros tipos de dictaduras. ¡Joder!, nunca se acaban!. Unos ejemplos:

La dictadura del CONSUMISMO (no necesita explicación, sólo ver la factura descarada de la luz, teléfono, la hipoteca, impuestos...y nuestra impotencia ), del CUERPO 10 ( Anorexia, Bulimia, dietas extremas...lechuga! , lechuga! ), del ESNOBISMO (querer aparentar ser de clase alta. Económica, social, intelectual) del HUMOR (no se pueden hacer chistes más que de blancos o contra la Iglesia, si no quieres ser tachado de machista, xenofobia, antisemita... Son malos tiempos para los humoristas. Si el humor alguna vez fue inteligente, ahora más que nunca, se le exige ser prudente).

Otro efecto rebote fue el DESPELOTE. Por edad, yo NO VIVÍ la dictadura. Pero sí viví la llamada TRANSICIÓN, y los cambios posteriores. En televisión (del blanco y negro al color. De dos canales "gratis" público, a 300 por fibra óptica previo pago), radio (llegó el rock, años atrás vetado), periodismo (según quién me pague, así escribo. Tendiendo a derecha, izquierda o monárquico), Internet...etc. Pasamos de pelis o series donde era raro ver unas piernas, y le colocaban dos rombos -rescoldos de la censura franquista- en el margen superior derecho, como si fuera una película X, al despelote total. Aquellas generaciones oprimidas, cohibidas...se les salían los ojos de las órbitas, por ver unas tetas en la pantalla.

Bueno!! Me he ido un poco por las ramas.

El caso es que aquel hombre al que llamaban "el cuadrado", puede fuese apellido. Llevaba tatuados en los dos antebrazos, por la cara interna, dos hermosas hembras semidesnudas de su época, tipo Marilyn Monroe, que ya empezaban a chuchurrirse por la natural oxidación y flaccidez de la piel, acompañando tanto a la decadencia de la modelo imaginaria o real, como del que una vez fue, un fuerte antebrazo (y los niños nos reíamos, todo quedaba tan lejos).

Unos años después, vino la moda del pendiente masculino, de la euforia por los tatuajes antes "prohibido", de la salida del armario, los metro sexuales...y bla, bla, bla. Ahora son las mujeres, las que más fuman, las que tienen tos matutina de camionero (?)

Hoy nos encontramos también con la dictadura del voto. Gana uno, se unen los perdedores y gobierna un mediocre.

¿Qué le vamos a hacer?

Si nos unimos todos los perdedores, podríamos quitarle el mundial de fútbol a Francia, y dar por ganador a la República del Salvador. Pasen y voten...

También podríamos sacar la momía de Franco. Unos la montarían en un caballo con espada en alto, como cuentan del Cid Campeador, para intimidar a los moros. Otros le prenderían fuego, y dirían haber ganado la Guerra Civil más de 80 años después. Sólo que puede SEAN los nietos, de quienes lo auparon al poder. Yo qué sé...