Probablemente habrás observado, que la mayoría de las líneas eléctricas discurren en paralelo con las carreteras. Los principales motivos son: evitar expropiaciones, atropellos de fincas, un trazado de fácil acceso y vigilancia por parte del personal de mantenimiento.

Al circular por la autopista a la altura de un pueblo llamado San Juan del Puerto (Huelva), muy próximo al Parque Nacional Doñana, sobre las torres eléctricas se puede apreciar que hay unos invitados muy especiales. No queda ni una sola de ellas, sin su correspondiente nido de cigüeñas encima. Incluso a algunas torretas de anclaje o especiales, les he llegado a contar hasta cinco nidos, instalados a diferentes niveles. ¡Es un espectáculo! Una belleza y un chute de optimismo, ver tantos nidos ocupados por estas fechas. Aunque las compañías eléctricas obviamente, no opinen lo mismo. Por los problemas y trabajo que les causan.

Las muy listas, han cambiado campanarios de iglesias por torretas eléctricas. Evolución, evolución...adaptación "renovarse o morir" en busca de tranquilidad, de la seguridad que les proporciona la altura, la visibilidad, vigilancia, etc. Incluso un cartel que dice: ¡ATENCIÓN! alta tensión, peligro de muerte. Para ahuyentar a los humanos. Y ellas, a pesar de no saber leer, procuran posarse en un solo cable. Quizás sus crías con el tiempo se vuelvan cada vez más radioactivas, proactivas...y te lleven a casa una docena de niños "eléctricos", hiperactivos... capaces de dominar la tecnología antes de echar los dientes.

¿Ves? Ya conoces el verdadero motivo por el que tus hijos o nietos pasaron de generación X a Y, después a Z, y los últimos pertenezcan a la generación T (de táctil). Si te salió extremadamente futbolero, pintor o poeta... reclame antes de 15 días. Luego no hay devolución. Jah! Debió ser, por algún golpe durante el transporte o aterrizaje