Rufo es un ser de tierra que apenas sabe leer y escribir . Sabe lo elemental pues de chico casi no fue a la escuela.Había que trabajar el campo y atender los animales.
Habla poco Rufo.Quizá piensa poco. O no. Tal vez reflexione mucho pero como casi no habla...No se sabe.
Rufo es un ser de tierra, hecho uno con ella, mientras cava y cava.
Su universo es el campo, el arado, los surcos , los terrones... Y arriba un sol que le perla la frente de sudor.
Solo estuvo una vez fuera del pueblo , en Alcalá de Henares, para hacer el servicio militar.
Nunca fue de vacaciones. Nunca salió a tomar el aperitivo al bar. Nunca asistió con los amigos a jugar la partida.
Rufo no sabe ni coger el teléfono ni el metro.
Pero Rufo, ese taciturno ser de tierra, bonancible y prudente, es el mejor y más trabajador agricultor del lugar.
Rufo hoy, a sus 88 años, ya solo atiende el huerto. Por las noches, se refresca con ponche , la única concesión que se permite en su vida frugal.
¡Ay, pobre Rufo, ese ser de tierra tan grande!