¡Qué triste ha quedado el barrio! ¡Qué tristeza en la vereda, pues casi sin previo aviso se ha ido el vecino Néstor! Hoy ví el árbol de su casa llorando con desconsuelo y ensimismadas las hojas sollozaban en la acera. Extrañaremos sus charlas de mañana en la vereda, y hasta la escoba hoy se suma para despedir a Néstor. Clara
Texto agregado el 07-05-2018, y leído por 165 visitantes. (21 votos)