Veo mis manos y las manos de mi madre
Ya mayores
En espera del sueño sin poder despertar
Me encuentro día a día en paz y gratitud
¿Es así el cielo, el paraíso de los padres del libro negro?
En verdad
No siempre lo siento
Muchas veces salgo
Como si me embriagara de tanta belleza
Y luego
Perdido en un parque brillante
El vacío inunda mi ser
Sintiendo que no soy eterno…
¿Qué es dios?
¿Qué es el cielo?
¿Importa?
Afecta este instante y el resto que nos queda
Abrir los brazos a la divinidad
Empozada en nuestro interior
Y brillar
Cambiar el mundo
Al menos el que nos rodea…
Y luego… En verdad no lo sé…
Y ese sentimiento tan pequeño
Lo es todo para mí…
Vivir sin temores
Sin futuro
Tan solo instante tras instante
Cogido a la divinidad
Empozada dentro nuestro...