" Quien a los veinte no es de izquierdas no tiene corazón"



No conoció a su abuelo paterno pero ,como hacendados del lugar, era falangista. Había nacido en 1910 y sí , dicen que hasta iba a jugar la partida al bar vestido con uniforme de la Falange, hecho que a la nieta siempre le pareció rancio y caciquil.
Pero fue la muerte del padre la que forjó en la jovencita el ideario político , es decir, el fallecimiento del progenitor la hizo socialista, frente a todo pronóstico.
Su padre, al igual que todos sus tíos, era de derechas, franquista, como muchos en aquella España. Nació en 1936 , el año del estallido de la guerra, y murió en el 72, por lo que no conoció más que Dictadura. Practicó un franquismo sin alharacas, más discreto que el falangismo del abuelo, su padre.
Era de Misa todos los domingos y poco amigo del Carnaval, fiesta del diablo.
Su óbito temprano dejó huérfana a su hija a los nueve años, que fue a un internado de monjas a los diez, con una beca por orfandad.
En esos años murió el dictador . El ideario político de la jovencita se forjó al son de la exigua paga de viudedad de su madre; al calor de la historia de su amiga Rosi, cuyo padre se estrelló contra un árbol, incendiándose;a las noticias de las internas asturianas que hablaban de la mina y la silicosis;a la lección de Margarita y Teresa, las gemelas de un pueblo miserable de Castilla, que empezaban el curso con las manos agrietadas de trabajar en el campo;a la de Josefi, desde niña interna pues sus padres nunca se la quisieron llevar a la emigración a Alemania; y a otras variadas historias de chicas vapuleadas por la vida y unidas en el colegio por las becas .
La niña veía el empeño que todas sus compañeras ponían en salir de la pobreza mediante el estudio.
Alejada del entorno familiar, se fue gestando en ella una ideología afín al Socialismo .
Así que ,cuando pudo votar por primera vez, lo hizo por Felipe González, cuyo póster presidía el cabecero de su cama. Dejó de ir a Misa y militó desde entonces en un escepticismo religioso . O sea, fue rompiéndose el cordón umbilical con las creencias de la casa y la familia, tan distantes de las suyas.
De no haber muerto su querido padre, tal vez su vida , al igual que su ideología, habrían sido muy distintas.
¿Quién sabe?...