Jugando a peinar el cielo Entre cabriolas y piruetas Nace un arcoíris Se ven nubes que envejecen Al fragor de los dragones. Silencios de bolsillo y muñecas asesinas Doman los batires de las alas infernales Ensombrecen las colinas borrascas de margaritas Estrangulan los caudales de los dulces manantiales Hasta que brota sangre al sesgarse la matriz Y así seguir, con sabor a jabón de piruleta Y unas ansias virulentas Dando tumbos hasta el próximo elixir Por un desierto angosto Que no deja De caer Sobre el mar marchito que se abre para ti, Ser de polvo, y polvorín.
Texto agregado el 31-03-2018, y leído por 136 visitantes. (7 votos)