Malvados, ¿Tu más que yo?

Es sabido que los hombres hacen daño, pero antes de tildarlos de malvados, hay que indagar en la “intencionalidad” de sus actos.

Dado que, cuando una mujer sufre por un hombre, este último no tiene idea qué diablos hizo ahora que ella está llorando nuevamente. Y esta actitud de sorpresa es muy común, pues si ellos olvidan u omiten(suena más suave) caricias, reconocimientos, disculpas, entre otras faltas, es de “despistados” que son. Y si engañan es de puro cal... .

Pero la capacidad o cualidad de maldad en nosotras las mujeres.
¡Afirmen los santos!
Uf, sólo eso les digo, uf.

Creo que hay que investigar si Maquiavelo era un trasvestido!!!, ya que debió ser ella y no él.

Ahora las invito a contestar lo siguiente: ¿Podemos reconocer con blanco aura, que cuando hacemos daño es sin querer?, ¿con qué cara negamos la intención y planificación en cada uno de nuestros actos?.

Ejemplifiquemos, cuando chocamos por “accidente” en una fiesta con el tipazo ese, que se parece a Ken made by Mattel, ¿ustedes creen que es por despistadas?.
Noo!, fue todo un cálculo logístico de pretender ir al baño justo cuando él se para de la barra.

Y cuando ponemos nicks sugerentes en el messenger, ¿es porque nos vino una inspiración literaria divina a lo Mistral?.
Noo!, son flechas irónicamente filudas, para que al bom bón, se le ocurra invitarnos un helado y otras cositas.

Ah, y la extraña llamada telefónica que hacemos al mejor amigo de nuestra nueva conquista, ¿es porque “su amigo es mi amigo”?.
Noo!, no es más que la vil estrategia de sacar información indirectamente, de todo lo que nuestra pareja, sutilmente, ha omitido en la relación. O sea, armar expediente.

Y ese insinuador escote, ¿es porque este verano está que arde de calor?.
Noo! Son tácticas de guerra, para seducir al enemigo y obtener todo lo que queramos, con solo apuntarlos con esta prominente arma de doble cañón.

Respóndanme, ¿aún siguen pensando que cuando reconocemos sólo una o dos parejas sexuales anteriores a ustedes, ¿es porque somos exquisitamente cartuchonas y exclusivas para ustedes?.
Ja!, no, es que la amnesia moral nos obliga a castrar nuestra lista negra. Ya que a un hombre con basta experiencia sexual se le tilda de mujeriego experimentado, pero si nosotras nos jactamos de nuestras mil y una noches, simplemente nos llaman “putas”, y no necesariamente mujeres experimentadas.

En fin, hay que ver, que de pequeñitas que nos manejamos en esto de la planificación y estrategia. Claro, si ellos sólo jugaban a la pelota, todos transpirados en la esquina, pero no se imaginaban cómo los observábamos tras la ventanas, colgadas al teléfono en una convocatoria en cadena para juntarnos y aparecernos casualmente frente a ellos.

Ah, que escuela que es la vida, y qué clases y materias que imparte mi género. Pero lo más tragicómico de todo, es que igual terminamos mal, tanto cálculo, para concluir en lo mismo..., ¡ellos no entienden nada!, ¡ellos no nos entienden nada!

Esto de usar los dos hemisferios, es un estrés, cero espontaneidad, excesiva premeditación. Y en definitiva:

¿Qué maldad es más negra?¿ La intrínseca (o por inercia) o la intencional?.