La entronización de hijo único en España ha propiciado el afloramiento de una figura hartamente singular e irritante : la madre mánager.
Este espécimen que prolifera como los hongos tiene por divisa : ¡ Qué listo es mi niño! Y digo bien : niño , pues ahora son considerados niños hasta la treintena.
Efectos: hay mucha madre de niño superdotado.
Ninguna madre de esta estirpe tolera que se le diga que a su hija/ o hay alguna disciplina que le cuesta. Siempre buscará alguna excusa: la culpa es del profesor, tendrá algún síndrome( TDH...) , su amigo perjudica a su vástago ,etc.
Hoy tropecé con un ejemplar cercano a la madre mánager en mi hora de atención a familias: la matriarca marisabidilla porque hizo bachiller.
Como es estudiada, hace alarde de saber más que el profesor, al que abrasa a dudas pues estudia con su hijo que ya está en bachillerato.
Viven por sus hijos, les usurpan la autonomía y coaccionan al profesor porque, claro, no entra en sus cálculos que su hijo repita curso.
Se entrometen en la labor del profesor haciendo gala de pésima educación.
La de hoy sugería retrasar examen de un libro porque a su retoño no le da tiempo a acabarlo .Los libros están fijados el primer día de clase.
Yo así se lo hice saber pero no se calló y siguió sentando cátedra, esta vez sobre la inoportunidad de la huelga de mujeres de mañana, por la que el alumnado adelantó mi examen un día, por lo cual , según ella, su hija no pudo acabar la obra.
Con tanto intrusismo ganas me dan de entrometerme en su pésima forma de educar ;pero opto por callarme y dar un par de muletazos hábiles, pues los profes de hoy , acostumbrados a ser ninguneados por la Admon, somos diestros en las lides del toreo.
Se fue la buena señora tan contenta y yo quedé con el estómago en bascas.
Por suerte es su hija la que viene al centro, no la marisabidilla madre mánager.