...el hombre sale con una sonrisa instalada en sus labios y sus ojos desde el club de natación,ya han pasado tres meses desde que ingresó sin saber ni una gota de nado.
Tenía 37 años cumplidos y muchos sueños sin cumplir,un par de hermanos y un padre expertos en nadar,sin embargo,él ,siendo el menor,jamás nadie le enseñó y hoy ya a los 37 años había dado una prueba de nado simple y lo había logrado,estaba alegre. Su hijo de 10 años,hace 5 que ya sabía nadar,él se había preocupado de llevar a su hijo a un taller de natación,no lo dejaría abandonado como a él lo dejaron...era doblemente feliz.