1. He aquí unos pasos infalibles para ingresar en el mundo de los opulentos y adinerados:

- Concientícese de que no lo hará trabajando.

- Comience haciendo contactos con gente importante: banqueros, empresarios, políticos, periodistas.

- Dese a conocer concurriendo a programas mediáticos, a los que se habrá hecho invitar provocando primero algún escándalo, creíble o no, pero que sea resonante.

- Procure limpiar su imagen negando todo lo que se comenta, y culpando a terceros, que aprovecharán también para promocionarse.

- Hágase el firme propósito de entrar en el mundo de la política, y estudie discursos convincentes (hechos por otros), para concientizar a las masas que usted tiene las mejores intenciones de ayudar al pueblo para llevar una vida mejor, más sana, libre de apremios económicos, con la que gozará de la paz y justicia social.

- Una vez que logre ser designado candidato de su partido, propongase hablar mal del gobierno anterior y de presentar estadísticas y pruebas que lo desacrediten (al gobierno anterior, no a usted).

- Procure por todos los medios de no escatimar dinero en su campaña política. Para eso necesitará un padrino que ya tenga poder. (Una vez en el cargo arbitrará los medios para multiplicar el dinero invertido, y mucho más).

- Trate por todos los medios de hacer fraude electoral.


2. Una vez en su cargo ya tiene el camino libre para HACERSE RICO.

- De vez en cuando trate de presentar un buen proyecto social, y por medio de comprobantes creíbles, multiplique los gastos de inversión, que irán en beneficio de su bolsillo.

- Reparta dinero a diestra y siniestra, y siempre adjudiquese con orgullo esta ayuda social. (Con seguridad podrá sacar una buena tajada con cada donación).

- Realice viajes a diversos países con viáticos y estadía gratis, cuyos gastos engrosará en un 500% o más de su verdadero valor.

- Si existiere algún avión disponible para realizar emergencias (por ejemplo enfermos graves que necesitan trasladarse con urgencia), aproveche a usarlo como medio de transporte para usted y su familia.

- Blanquee su dinero construyendo lujosos edificios: hoteles, hospitales, fábricas. (No es importante ponerlos en funcionamiento).

- Enajene sus bienes mediante un testaferro de su confianza. Usted ya sabrá como recompensarlo.

- Si es necesario entierre parte de su dinero, pero por favor, deje planos-guía para su ubicación, que servirán en el caso de que usted olvide dónde lo dejó. (No conviene dejarlo en lugares húmedos o inundables).

- Si es descubierto en alguno de sus presuntos “chanchullos”, nieguelo rotundamente y exprese enfáticamente en público que usted es víctima de una difamación y de una aberrante persecución política.

- Si es desplazado en su cargo, es el momento de denigrar a su adversario con todas sus fuerzas y hacer todo lo posible por hacerlo caer.

- Recuerde: no todo está perdido. Los miembros de su familia posiblemente puedan llegar al poder, si es que no lo hicieron.

- En caso afirmativo (en lo que respecta al punto anterior), se aconseja repetir los mismos pasos.


PS: Sabia sugerencia la de buscar un buen abogado. En ese caso deberá repartir sus bienes, tan honestamente logrados. (pero saldrá airoso, no lo dude, y seguramente en poco tiempo su nombre -limpio- aparecerá en alguna calle o alguna institución pública).