BAÑO PUBLICO
Cuando era joven y las urgencias hormonales presionaban ya cansado de hacerme justicia por mi propia mano, cualquier agujero era bueno para colocarla, en esa etapa nada era desechable, jóvenes, cuarentonas y viejas que daban un poco de bola y querían guerra, ayudaban a aplacar los reclamos del cuerpo, cualquier lugar y ocasión eran buenos para la faena, pero hay uno que por ser algo insólito, siempre recuerdo.
Era uno de los veranos mas calurosos que me había tocado soportar, el balneario a pocos Km. de mi pueblo era el lugar propicio para aplacarlos calores, y a la vez por la cantidad de mujeres que concurrían con sus familias, en las cantinas se bailaba desde temprano y eran muchos los fugaces romances de verano que se concretaban.
En una oportunidad, había entablado una relación en la playa con una piba algo menor que yo, con las mismas urgencias, pero vigilada de cerca por su hermana mayor y sus viejos que la acompañaban a sol y sombra. Le permitían bailar sin alejarse de la mesa que ellos, la oportunidad se dio cuando tuvo necesidad de ir al baño,
Eran baños públicos precarios divisiones de chapas y tenían una traba común, La acompañe esta ellos y al ver que no había nadie cerca, me introduje yo también, trabamos la puerta y comenzamos a darnos besos y caricias inexpertas, mis manos no daban abasto tocando, palpando apretando, ella al principio se mostraba algo esquiva, pero luego se fue soltando y y se animo a agarrar mi pene sin que yo se pida, a la tercer apretada me vine con todo enchastrando sus manos y parte de sus ropas , para ese entonces el baño comenzaba a llenarse, escuchaba los ruidos de las mujeres al mear, algunos pedos, y olores que en el estado de calentura que estábamos no teníamos en cuenta, alguien golpeo la puerta diciendo hasta cuando vas a esta ocupando el baño, dale que hay gente esperando.
Eso hizo que se precipitaran las cosa, ambos con los pantalones bajos, pero como ella era más petiza se me hacia incomodo penetrarla, no quería saber nada, tenia miedo de quedar embarazada y no tenía ni un forro a mano, de alguna forma logre metérsela, ella me dice con cuidado, es mi primera vez, en ese momento no pensé en nada solo en meterla a fondo, sin contemplaciones, dio un grito que me asusto, lo mismo a quienes estaban en los otros baños, estas descompuesta, necesitas algo, preguntaban -No dijo_ y seguimos cogiendo, se ve que el dolor había pasado porque musitaba así,..así, dale más fuerte, me gusta, , me gusta haaaay , parecía que se hubiera orinado tal fue su eyaculación, nos limpiamos como pudimos, y al no air a nadie salió ella primero y me hizo señas que saliera yo también, nos dirigimos a la pista y seguimos bailando, hasta que le hicieron seña para irse.
Logre verla solo un par de veces, sin que llegáramos a nada, termino el verano y nunca más volvimos a encontrarnos
Agustín Secreto
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