ORGASMO.
Me Encanta estar ahí, justo en el instante en que todo a mi alrededor desaparece y lo Único que queda son nuestros cuerpos, hundidos en la mágica lumbre de un amor fresco y volátil como un beso, y eterno como un recuerdo.
¿Por qué? Por sentir como tu piel desprende un aroma que conjura al demonio y a su infierno en el que arden las caricias rojas y amarillas que tatúan huellas lívidas en la piel, que gotea como un tamiz el sudor frutal del aguardiente delirante del deseo
Me gusta vivir el confuso instante en que no sé qué comisura es mía y que labio es tuyo, si los besos van al fulgor delirio o regresan de La inexistente pausa.
Tu piel sensorial, derritiendo en mis manos resinas que nutren mi firmeza. Aromas, Luces y sabores justos, como un vino en vendimia de tus uvas canela, que al libarlo, me embriaga con su dulzura sexual que agoniza y vive en el mismo segundo. Gotas de sal de un sudor nuevo diluidas en fragmentos de dulzura de lenguas pretensiosas
Me gusta estar ahí, al filo del abismo de tus piernas, a vísperas de precipitarme a ciegas, sólo iluminado con el resplandor de tu mirada que, como dos faros de luz púrpura y seductora me gritan con parpadeos que queman... adelante, adelante... El Edén es aquí y ahora. y con las alas abiertas. Este cielo, te da la bienvenida...
Así, cerca, tu aliento satinado de alquitrán vuela y me posee, como un duende que alebresta el velo tenue de la imaginación. Y de pronto, lo inicio que queda, es el abismo de una lujuria tan breve como un jadeo que agoniza al vuelo en la eternidad de 11 segundos...
Copyright , Ever Sangel |