6:35 am (Él): Despertaba un día más y con la misma motivación de salir adelante se iba a trabajar, sin saber que minutos más tarde viviría una curiosa aventura.
6:34 am (Ella): Despertaba un día más cansada de tantas cosas y con poca motivación se dirigía a trabajar, sin saber que minutos más tarde viviría una curiosa aventura.
Ambos vivían cerca (pero no lo sabían), ambos trabajaban cerca (pero nunca se visitaron), ambos tomaban muchas veces el mismo carro (pero tampoco lo sabían) y ese día jueves se sentaron en el mismo asiento compartido y la curiosidad de ella llevó a hacerle el habla: "Hola que tal, estudias ahí, Él respondió: Si, en las noches" Ella muy interesada le empezó a contar que estudiaba ahí también, pero otra carrera en el mismo horario. Ambos empezaron a hablar sobre ellos mismos, sus metas y decidieron intercambiar números. El viaje hizo que se hicieran amigos y el interés creciera, era obvio el interés.
Durante todo el día, entre minutos y minutos, se mandaron mensajes, viviendo ilusiones de una posible relación, haciéndose preguntas sin sentido y algunas con sentido, dando a entender que uno quería estar con el otro sí o sí. A la salida se encontraron y fueron a tomar un café y Ella le propuso para dar un paso más (no debería sorprenderles que Ella sea la de la iniciativa, Ella siempre fue así, hacía y decidía lo que realmente le gustaba)
Sonará extraño pero muchas relaciones parten de encuentros curiosos entre dos personas, y esta no se escapa de la curiosidad. Cuando Él decidió pedirle para seguir saliendo y conocerse sucedió lo que todos esperaban: Ella le dijo que venía de una relación tormentosa y que si había aceptado salir era porque quería probar algo nuevo con alguien que nunca conoció. Él sorprendido le dijo que acababa hace un par de días de terminar con una relación tormentosa y que si había aceptado salir era porque quería probar algo nuevo con alguien que nunca conoció. Entonces, ¿qué pasó? Pasó que ambos se dieron el primero beso aquel 12/12/2012 y curiosamente hoy 12/12/2017 Él recordó que lo que se promete se debería cumplir.
En el 2013, Ella muy contenta por el año hizo el mismo recorrido del carro donde se conocieron y todo parecía amor, mejor que el de las películas. En el 2014, Él hizo el recorrido del carro para no perder la costumbre. Pero, ¿saben cuál fue el error?, el error fue asumir que solo un día era el justo y necesario para revivir el verdadero amor. Por lo que en el 2014 no hubo recorrido, en el 2015 solo se les ocurrió, pero no lo hicieron porque Ella estaba embarazada (de aquel hijo que tiempo después perdió) y en el 2016 ya no había nada de iniciativa e ideas de amor; pero, si hubo un recorrido: Ella se fue, lejos de la vida de Él.
El 11/12/2017, llegó el último mensaje de Ella hacía Él y mostraba lo que desde un comienzo se esperó: Desinterés, Desilusión, Desesperanza. Entonces, si Él sabía que no esperaba mucho de ese mensaje misterioso, ¿por qué vivió esperando que algo así sucediese?
Si algo le enseñó la experiencia hoy 12/12/2017, es que la vida tiene un sentido importante si uno llega a ser realmente feliz… y que un día no marca tu vida (aunque en el fondo sabía que sí) y que las preguntas que aparecían no tenían tanto trasfondo más que el que uno mismo le ponía. Por lo que, decidido a tomar un nuevo rumbo a sus ideas, tomó el celular y leyó por última vez el mensaje que tantas ideas le había generado: "¿Acaso creíste que con un día bastaba?"
--------------------------------------------------
Días después… 6:35 am (Él): Despertaba un día más y con una nueva motivación se iba a trabajar, sin saber que más tarde viviría un encuentro que le llevaría a analizar la extraña fascinación que tienen algunas personas por vivir siempre de los recuerdos. |