Hace media vida
Granada
se mojaba bajo mis pies
mientras yo me regaba
con una lluvia
de primavera
y florecía
entre sus calles
después de un largo
y duro invierno.
Hoy sigo brotando
en otra ciudad ya
pero nunca
lejos de ella
pues vuelvo cada tanto
a recorrerla
- descalza si me dejan-.
Texto agregado el 26-11-2017, y leído por 76
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