RECUERDOS CON MI MADRE.
Madre, te esperaba sentado en el fogón , en aquellas tardes en que los vésperos se arremolinaban en el firmamento anunciado la llegada de la noche, el frio arreciaba con el empuje de las tormentas hasta entumecer el cuerpo; eran esos tiempos, en que vivíamos en “Ucchapampa”, donde las punas alimentaron mi existencia púber y la laguna de “Culluna” y sus manantiales cristalinos encantaron mi alma.
Recuerdo madre , que en las mañanas las flores reían y sentía su fragancia resguardar tu existencia.las lluvias de abril , con su danza cristalina ,llegaban presurosas rebotando en el césped en miles de gotitas pequeñísimas que se perdía entre las raíces de la madre tierra.

Madre, hoy han llegado a mi corazón las divinas ensoñaciones de los días en que trajinamos por esos maravillosos páramos, donde me entregaste la luz de mi existencia y las revelaciones de las noches sagradas, estos recuerdos, inundan mi existencia, sublimiza lo más profundo de mi ser, multiplicando mi añoranza y mis anhelos.

Madre ,te confieso que en mi corazón púber nunca hubo tristeza, nunca me faltó nada, todo el cariño que te brindo la vida, me lo diste entero ,además de ello, el cariño de los padres de familia y tus discípulos, con los cuales no hacía falta nada más ;por eso madre mía, nunca anduve por los andurriales ,me bastó esa infancia de embeleso que me diste ,ante los cuales me hinco de rodillas por haberme templado en acero y desterrado la abyección .

Madre, en este día , en que aquella tierra de mi infancia grita de dolor y los arsénicos y relaves envenenan la laguna y los manantiales que viven dentro mi ser, sube tu espíritu y tu halito sobre el cielo azul de tu comarca , gritando NO a la muerte ,SI a la vida ,haciendo saborear nuestro mañana ;son tus noventa y dos años de vida y un día de la madre más que estamos junto a ti madre bendita.