Con una patada el cerrojo de la portezuela cedió, y Alberto sin pensarlo levanto su arma, con los ojos inyectados de sangre y descargo su furia en cada una de las balas que acciono en el cráneo de Daniel su mejor amigo, la respiración exacerbada y la tensión de los músculos disimulaban las lágrimas que corrían por el rostro de Alberto, Daniel yacía en el suelo, inerte, la sangre se expandía por la habitación. Mientras Alberto encuclillado sollozaba sin consuelo con aquel trozo de papel en la mano.

Alberto y Daniel habían sido compañeros de toda la vida de esos que se encuentran en tus recuerdos de la infancia con los que se viven los pasos de la niñez a la adolescencia y de la adolescencia a la adultez, habían sido inseparables, compañeros, confidentes, intuitivos y ahora socios en su etapa adulta en la empresa de mercadotecnia que habían construido peldaño a peldaño y habían logrado posicionar en el ranking estatal de empresas con mayor crecimiento, Alberto López había logrado formar una familia con su despampanante esposa Camila una mujer de ojos azules y cabellera dorada, cuerpo espigado y facciones finas con quien a su lado había dado vida a su pequeña hija Romina, sin embargo Daniel Rebolledo en las cuestiones del amor no había sentado cabeza y mediante su regordeta cartera se daba vida de rey, estrafalario, elegante y sofisticado se dedicaba a ampliar su larga lista de conquistas; la convivencia entre estos era constante y continua las parrilladas y convivencias eran frecuentes, situación que hacia enfadar a Camila que la mayoría de las veces tomaba a su hija y se subía a su habitación, en vista de que no compartía el estilo de vida del Mejor amigo de su esposo, cosa que a Alberto le molestaba en demasía.

Alberto conoció a Camila durante su estadía en la preparatoria en vista de que acudían a la misma clase de economía y se sentaban a escasos lugares sin embargo el nunca se animó a hablarle era una persona reservada y tímida sin embargo su compañero de pupitre Daniel era el alma de la fiesta y conocido en toda la preparatoria por lo que al enterarse de los deseos de su mejor amigo este encontró la forma de romper las barreras entre Alberto y Camila y desde ese momento fueron almas gemelas, inseparables.

La mañana del terrible suceso Alberto se levantó temprano para ir a trabajar porque había una junta importante con un gran inversionista japonés y al estar desayunando por un descuido de su hija romina vertió el jugo de naranja sobre su traje nuevo, sin embargo lo tomo con optimismo y corrió a cambiarse, se montó a su vehículo y se percató que la llanta estaba ponchada situación que lo molesto un poco pero sabía que aún había tiempo para llegar a la importante cita así que opto por utilizar el transporte público, mismo que estaba completamente lleno y le toco irse de pie, el tráfico era descomunal la desesperación lo empezaba a invadir y el tiempo avanzaba sin cesar por lo que tomo su celular para marcar a su socio y que este recibiera al inversionista sin embargo se dio cuenta que su celular no tenía carga, sin embargo intuyo que su compañero estaría ahí para hacer su trabajo, por fin después de dos horas pudo llegar a la empresa no sin antes percatarse de que había olvidado su maletín en el desayunador con los documentos importantes para la reunión al llegar a la empresa la secretaria le informo que el inversionista japonés se había retirado muy molesto de la empresa en virtud de que tenía demasiado tiempo esperando, Alberto molesto llamo de su oficina a su socio Daniel el cual aún desvelado le hizo saber que la fiesta se había prolongado y que aún se encontraba indispuesto para laborar, Alberto ardió en cólera y tuvo una acalorada discusión con su socio manifestando temas hirientes que fragmentaban la relación que tenían.

El día transcurría y Alberto daba órdenes sin cesar la situación en la empresa venia cuesta abajo y el trataba de sacar el barco a flote sin embargo un correo electrónico del Banco que llego a su bandeja de entrada lo cambio todo, este decía detalladamente todas y cada una de las inversiones y movimientos que había realizado la empresa a pequeños negocios que cambiaban remotamente de dirección fiscal y se escabuian en el ojo del sistema desapareciendo o declarándose en banca rota, pero lo que llamo más la atención de Alberto fue que todas estas empresas pertenecían de una u otra manera a Daniel Rebolledo, por lo que hablo a su secretaria solicitándole cierta documentación en la cual después de una exhaustiva revisión se pudo percatar de que su socio y amigo de la infancia, compañero leal había desfalcado a la empresa y se estaba llenando los bolsillos a costa de él y del trabajo de su vida, trato de mil maneras de comunicarse con Daniel sin embargo el hacía caso omiso a las llamadas, la ira se desbordaba en su rostro por lo que de un arrebato tomo el autobús y se dirigió a su domicilio para pensar las cosas mejor.

Al llegar al domicilio Camila se encontraba en la cocina mientras romina su hija dibujaba en la sala sobre una pila de libros y libretas que había sacado del librero, Alberto se sentó en la Sala a tratar de ordenar sus ideas sin embargo la traición era evidente y la rabia se incrementaba visiblemente en él, fue así que volteo a ver a su hija que arrancaba hojas de las libretas y libros que dibujaba, ahí observo la libreta que su hija sostenía arrancando trozos de ella en la que se leía diario de Camila, por lo que se levantó rápidamente y trato de evitar que siguiera rompiendo el diario, lo separo de sus manos y empezó a recoger los fragmentos rotos sin embargo al recoger un pedazo de papel no pudo soportar la curiosidad y leyó “. . . . . viaje de mi esposo ha durado demasiado y he sucumbido a la seducción de Daniel me ha poseído y lo he disfrutado, pero amo a mi esposo lo único que me desorienta es que a las dos semanas siguientes me entere que estaba embarazada, es el cargo de conciencia que cargare durante . . . “,las lágrimas cayeron sobre aquel trozo de papel la rabia lo había hecho perder los estribos, las manos le temblaban mientras su mundo se desmoronaba, su mundo era una mentira, una telenovela y él era el actor principal, subió a su habitación tomo el revolver regalo de su abuelo y salió del domicilio.

José Miguel Torres